El nuevo trabajo de Daniel Ruiz sigue un modus operandi similar al de sus últimos lanzamientos. Esto es, la presentación online de diversos temas durante un periodo de tiempo para, al término del mismo, aglutinarlos en un EP que les otorgue carta de autenticidad, tanto sonora como estilística. Así, tal como ocurrió con Stories from a Whiskey-soaked Mind (2018) y Saturn’s Rings Got Replaced By An Ad (2019), los siete nuevos temas que Daniel ha ido desgranando a lo largo de los últimos meses (dos de ellos ya avanzados en estas mismas páginas) vieron finalmente la luz a finales de mayo, recopilados en una edición de formato físico tan sencilla como gráficamente sugerente.
Y el resultado ha sido un disco extraordinariamente cohesivo en el que lo nocturnal, tan caro a su estilo, se muestra más evidente que nunca. Álbum de teclados y voz, principalmente, se beneficia de la inclusión esporádica del saxo de Arnau Abadal puntuando atmósferas en los momentos adecuados. Cada vez más maduro líricamente, Daniel se confirma con estas nuevas canciones como un excelente creador de ambientes, ya sea en base a referencias reconocidas («A Little Song for You» puede que sea su canción más Nick Cave hasta la fecha) o a su propia personalidad artística, perfectamente delimitada a estas alturas del partido. Lienzos musicales tan oscuros y amenazantes como «The Velvet Lynx», tan expresionistas como «Her Purple Dress with Thin Black Stripes» (puro cine negro entre volutas de humo y luces de neón) o tan acertadamente románticos como «My Girl’s an Ocean Away», lamento del amante distanciado que regatea con habilidad los lugares comunes, conforman una nueva y excelente exposición, otra remesa que añadir a una obra, la suya, en continuo proceso de renovación. En continuo progreso.
Eloy Pérez
