Haciendo un poco de memoria (y consultando discogs para asegurar el tiro, no vamos a engañar a nadie a estas alturas), desde aquel lejano y maravilloso The Bruised Romantic Glee Club (2006), doble obra maestra sin paliativos, no teníamos disco nuevo a nombre del señor Jota. Cierto que en 2011 nos ofreció A Scarcity of Miracles, el proyecto -subtitulado A King Crimson ProjeKct– junto a Robert Fripp y Mel Collins que a la postre supuso su fichaje definitivo para el equipo carmesí; ocupación a tiempo completo hasta este momento, en que vuelve en solitario con nuevo trabajo.
Aunque bueno, en solitario es un decir, porque si bien el material parte de su puño y letra, secundándolo tenemos -aparte de Fripp y Collins de nuevo- a Gavin Harrison y Tony Levin, con las colaboraciones de Peter Hammill, John Giblin y Mark King (recordemos que Jakko militó en Level 42 en la primera mitad de los noventa) entre otros.
Personal más que contrastado para dar forma a una serie de temas mucho más accesibles -dentro de la mínima complejidad requerida- de lo que cabría esperar a tenor del elenco. Culto e ilustrado, estudiante de Historia, nuestro hombre tan pronto se inspira en Julian Barnes y su novela corta Antes de Conocernos («Before I Met You»), como en la Declaración Balfour de 1917 («Fools Mandate») antes de rendir sincero homenaje al fallecido Pip Pyle, batería de Gong y Hatfield And The North en la magnífica «The Rotter’s Club is Closing Down», enésima muestra de su estima por la clásica escena de Canterbury. Le sumamos la elegancia melódica de «Uncertain Times», las orquestaciones como telón de su afilada guitarra en «Secrets, Lies And Stolen Memories» y la combinación de a capella y aires irlandeses en la dupla «The Borders We Traded» / «Trading Borders» y nos queda un conjunto tan sólido como dinámico. Un álbum, como decíamos, sorprendentemente fácil de escuchar, que muy acertadamente pone el virtuosismo al servicio de las canciones.
Eloy Pérez
