Lo son, les guste o no. Herederos por derecho propio de la mejor tradición rock de este país. Se han pateado nuestra geografía de arriba abajo, fundido incontables horas de furgoneta y carga y descarga de instrumentos. Esa ha sido su escuela, y han aprovechado el proceso. Ahora mismo, en presente, pueden presumir de haber compartido escenario con la mayoría de los grandes nombres del rock español. Y de haber salido de todo ello con un contingente de seguidores que no cesa de aumentar. Su nuevo álbum, Victimas del Sueño Americano, está listo para empezar a circular cuando las circunstancias lo permitan. De momento, vamos hablando sobre él y sus circunstancias con Adri, su cantante y guitarrista…
Vuestra trayectoria es atípica: un primer disco descatalogado por la banda, un segundo disco publicado en dos versiones… y ahora llega Victimas del Sueño Americano, tras muchos kilómetros a vuestras espaldas. Una auténtica oportunidad de llegar a vuestro público natural. ¿Cómo ha sido el proceso de composición y grabación del álbum?
Nuestra intención desde un primer momento era parar lo menos posible para hacer el álbum, tuvimos la suerte de que esa trayectoria atípica nos permitió reeditar Café Caimán y con ello seguir sumando kilómetros hasta finales de 2019.
Compusimos el disco mientras seguíamos en la carretera, aprovechando parones de 15 o 20 días para maquetar los temas, unas jornadas de producción y en 10 días grabamos el álbum. Hay una urgencia innata en las canciones que creo es palpable y aporta mucha realidad al disco.
Se habla, y se hablará, mucho de vosotros. Algunos recién llegados a vuestro mundo pueden desconocer vuestra trayectoria previa, pero son muchos años de conciertos en todo tipo de recintos, desde pequeños clubs a grandes recintos acompañando a lo más granado del rock nacional… ¿Cómo lo lleváis?
Hemos aprendido que el camino es largo, que las noches de gloria están seguidas de algún que otro bajón y que la única fórmula que nos funciona es la de tocar y tocar dejándonos la piel en cada escenario. Creo que si se habla de nosotros es porque no importa si has visto a Desvariados en pub, gran sala o festival, el show siempre tiene la misma energía, porque disfrutamos de todo lo que implica este oficio.
Sois jóvenes, comparados con vuestros referentes, y practicáis un rock and roll old school. No andamos sobrados de bandas que sigan practicando ese refrescante ritmo, y manteniendo la actitud necesaria… ¿Os consideráis un grupo que defiende las viejas esencias en tiempos de música urbana y autotune?
Intentamos buscar nuestra propia identidad, siempre habrá detalles que recuerden a… pero por lo que percibimos de la gente que nos escucha, se valora mucho la personalidad propia que tiene la banda, tanto en el sonido como en un lenguaje y una forma de transmitir el mensaje muy característico. No defendemos más que nuestras canciones, no nos sentimos abanderados de nada, nos encanta el rock and roll, es evidente pero no miramos por encima del hombro a ningún otro estilo. Si puedo decirte, tenemos mucha más calle que estos del urbano que comentas ahora [risas].
En “Besa mi Calavera” cantáis que el rock ya no es lo que era y que al sexo le falta actitud. ¿Soluciones?¿Qué nos queda?
El rock ya no es lo que era, porque hay muchas bandas de rock y pocas canciones de rock… entre las modas y lo políticamente correcto se blanquea el mensaje, el lenguaje y se desvirtúa el género. Yo crecí escuchando entre otros a Ilegales, y echo de menos ese tipo de irreverencia, la pose está muy bien, pero falta contenido. A nosotros como músicos nos queda intentar reconducir en la medida de lo posible esa tendencia … Desvariados seguimos escribiendo de cosas reales, con un lenguaje visceral y enseñando los dientes siempre que se nos da la oportunidad.
Hablando de referentes, son obvios y parecéis orgullosos de mostrar sus influencias. Y además habéis acabado colaborando con muchos de ellos, de Rosendo a Zigarros, pasando por Rubén Pozo y Burning. ¿Qué sienten unos chicos como vosotros compartiendo lugares y aventuras con ellos?
Hemos tenido la suerte de abrir shows de los buques insignia del género, Loquillo, Rosendo y Burning, la sensación de estar a su lado es difícilmente descriptible, una mezcla de respeto y emoción que a veces asusta. Crecimos tocando sus canciones, desde algún parque de Carabanchel soñábamos con ese momento y de pronto de un día para otro, en cosa de un año compartimos noche con todos ellos, es una pasada.
Mención especial, es de justicia, a Burning. Varias giras junto a ellos deben dar mucho de sí, a nivel de aprendizaje y experiencias…
La relación que ha surgido con ellos es muy especial, después de tantos conciertos juntos éramos sus niños, siempre nos han cuidado y hemos sido uno más en esas noches interminables que hemos compartido. Gracias a ellos, pasamos de tocar en pubs de 50 personas, a arrancar una gira en la sala Apolo de Barcelona, no sé, el Kafé Antzokia de Bilbao, la Riviera… sitios mágicos que nos hacían temblar las piernas, pero que nos daban una energía increíble.
¿Es por ello, por lo que hacéis una (excelente, felicidades) versión de “Muévete en la Oscuridad”?¿A qué se debe la elección de ese tema?
Durante años ha sido una canción muy especial para mí, si rebuscas tiene un mensaje genial que puede ser de gran ayuda cuando uno no tiene muy claro que es lo que está haciendo, esos días que la situación empieza a superarte. Tuve la suerte de poder cantarla con ellos en varias ocasiones, ya se convirtió en tradición, Johnny llegó a llamarme sin avisar al empezar el tema un día que estaba yo de público … ¿Hay algo más rock? La elección fue fácil, la consideramos nuestra y mucha gente ya la asocia a Desvariados. Hemos respetado mucho el tema original, añadiendo algún detalle conscientes y aportando inconscientemente nuestro sonido y personalidad, estamos muy contentos con el resultado y os puedo confesar que Johnny está encantado también.
El álbum es potente, con remansos de paz pero preponderancia de rock de guitarras a tumba abierta. ¿Por qué motivo decidisteis clausurarlo con la intimista “Todavía”?
¡Me encanta esa expresión! La sensación que tenemos nosotros, comparándolo con el anterior trabajo, es que (inconscientemente) abrimos el espectro, tanto por el lado de lo tranquilo como de lo salvaje. También es cierto que hay temas que dan la sensación de ser tranquilos, pero porque el anterior va a toda pastilla y crea ese efecto. El disco cuenta una historia, cada canción podría ser un capítulo que habla de un momento vital muy concreto del último año. “Todavía” cierra esa historia, intentamos meterle banda pero no funcionaba, dejarla fuera tampoco era una opción y estamos muy contentos con la decisión que tomamos.
El rock es atemporal, pero no puede abstraerse a lo que ocurre a su alrededor… la actual situación sanitaria está modificando planes de lanzamientos discográficos y conciertos ya programados se están recolocando. ¿Cómo afecta todo esto a vuestros planes?¿Cómo pueden estar informados vuestros seguidores?
¡Nuestros planes se fueron al carajo! [risas] Nos pilló con dos singles ya lanzados, se aplazó el lanzamiento del disco así como el concierto de presentación, se han cancelado muchas fechas de la gira… muchos medios están en standby y nos dificulta la promoción… el disco saldrá en Junio, una fecha un tanto rara pero no podemos hacer esperar más a la gente, veremos qué nos depara esto. Es sólo una página más en esa historia atípica de Desvariados que comentabas al principio. A través de las redes sociales pueden estar al día de cómo avanzan y reconducimos la situación.
Texto: Alfred Crespo
