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50 años sin Jimi Hendrix (2ª parte) / #EnRutaEnCasa

 

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Damos el pistoletazo de salida a una serie de artículos que conmemoran el cincuenta aniversario de la muerte de Jimi Hendrix. En los días que nos ha tocado vivir, su figura se antoja más necesaria que nunca. Humildad, creatividad, personalidad, pasión y compromiso. Son cinco elementos esenciales para entender a un músico que sobrepasó todos los confines, pero también, elementos necesarios para conllevar la crisis actual. Jamás hubo otro artista (¿James Dean?) que en tan corto espacio de tiempo ofreciese tanto al mundo y con tantas garantías. Porque la influencia de Jimi sigue latente aquí y allá, y no tan solo en la música. Cualquier artista que se erija a perpetuar una revolución, debe mirar con atención los mandamientos Hendrixianos, pues los suyos forman el manual más preciso y alentador.

En Ruta 66 creemos en la creatividad perpetua y por ello creemos en el legado y la presencia divina de Jimi Hendrix. Para este articulo hemos reunido a un puñado de guitarristas de la península y les hemos sometido a nuestro cuestionario Hendrix. Ellos son algunos de los tipos que mejor creen en esa revolución invasora que tomó las calles en 1966.

Colaboran, por orden alfabético, los siguientes músicos:

Alberto Belmonte (Schizophrenic Spacers)
Andrés Duende (King Sapo)
Daniel Bañón (Booty Hunters)
Gonzalo Portugal (Last Fair Deal)
Hendrik Röver (Los Deltonos/ Los Míticos GT’s)
James Vieco (Saturna/ Tears In Rain/ James Vieco Band/ Profesor de guitarra, bajo y batería)
Jorge Mizer (The Soul Jacket)
José «Pot» Moreno (Atavismo/ Híbrido/ Medicina/ Galvao)
LG Valeta (’77)
Luis Kleiser (The Kleejoss Band)
Miguel Moral (The Renegados / Last Fair Deal)
Pepe Ferrández (Dixie Town/ Promotor de conciertos en Sound Dealers)
Raúl Guerrero (Bourbon)
Soulman Sal (Uncle Sal)
Xarim Aresté (Artista en solitario/ Very Pomelo)

Seguimos adelante. Elegid un solo momento, ya sea un solo, un ligado, o un riff, que te diga: «Eso me sigue sorprendiendo aún habiéndolo escuchado mil veces».

James: Su uso del feedback en «Killing Floor», en el directo de Monterey. Es enfermizo y salvaje, y cada vez que lo oigo se me sigue erizando todo. ¿Cómo podía manejar esa cantidad de energía?

Miguel: La intro de «Still rainig, still dreaming»; esa guitarra ¡HABLA! Esos 15 segundos son irrepetibles; parece que te pregunta: «hola, ¿cómo te va?” o por lo menos es lo que siempre imaginé. Ja ja ja ja.

Andrés Duende (King Sapo) – Foto: Pixelinphoto

Duende: El momento en el que prende fuego a la guitarra por primera vez. Piénsalo, podía haber ido todo mal. ¿Qué hubiese pasado entonces? Pero no fue así, y saltó a un universo paralelo, que fue lo correcto. Lo mismo sucedió cuando interpretó el himno de Estados Unidos. La gente podía no haberlo entendido. Lo hubieran crucificado. Pero jugó al límite y su leyenda creció hasta un nivel desconocido.

Luis: El inicio de «Crosstown Traffic» me sigue pareciendo alucinante. No puedo evitar moverme con esa canción. Me pregunto cómo se le ocurriría algo tan sencillo pero tan efectivo al mismo tiempo.

Sal: Me sigue flipando el solo de «All Along The Watchtower» cada vez que lo oigo. Con esos sonidos grabados en panorámica, la entrada con el wah… En fin, me parece de otro planeta y es uno de mis solos preferidos. Escuchar eso con buen sonido o buenos auriculares es una experiencia de la vida.

Daniel: Sin dudarlo, la guitarra rítmica de «Bold as love». No hay nada más bello grabado con una guitarra eléctrica que esa pista. Podría decir lo mismo de la pista solista del mismo tema, pero si he de elegir una me quedo con la pista rítmica.

Gonzalo: El riff central de «Ezy Rider», que además, me parece uno de los mejores riff de la historia del rock.

Raúl: El «Machine Gun» que se marca en el Band Of Gypsys. Una barbaridad.

Alberto: «Castles Made Of Sand». No me canso de esos estribillos limpios.

LG: Antes he mencionado el uso del Wha-Wha, pero hay algo que siempre me flipa y me pone los pelos de punta cuando lo re escucho: la versión de «Red House» en el Atlanta Pop Festival del 1970. Realmente, hay muchos momentos épicos en su discografía, pero me he acordado de los solos y arreglos que se marca en ese «Red House» y me he puesto cachondo; es puro blues en general, pero es que cuando entra el Wha…, Dios, en mi vida he escuchado nadie usar así el wha. Eso es transmitir algo haciendo música y solo usando la puta escala pentatónica…, ¡si es que es para flipar!

Ah y casi me olvido… ¡La orgía de feedbacks antes de «Wild Thing» en Monterey! Me lo ponía en bucle de pequeño porque me encantaba que el tipo hiciera esa maravilla ¡sin tocar una puta nota!

Pepe: Todo lo que sea del Band of Gypsys y en especial «Machine Gun». Como tema increíble, original y fresco: «The Wind Cries Mary».

Xarim: Me quedo con «Voodoo Child (Slight Return)». Cualquier pequeño  fragmento de ella es una catedral.

José «Pot» Moreno: El solo de guitarra de «All Along The Watchtower». Cada vez que escucho la parte central me sigue pareciendo de otro planeta y sigo emocionándome muchísimo.

Jorge: Sigo alucinando con el solo de «All Along The Watchtower», paneado de un lado a otro con wah-wah y delay. Y también, con el sonido de «Voodoo Child (Slight Return)», con el que podría dinamitar montañas enteras.

Jorge Mizer (Soul Jacket) – Foto: Alvaro Milkyway

Hendrik: El comienzo de «Voodoo Child (Slight Return)», sin duda.

Durante la década de los años 90 hubo un resurgimiento de su figura y podías oír su influencia en multitud de bandas y artistas; desde Pearl Jam o Soundgarden a Blues Traveller o  Eric Gales, por ejemplo. Si hubo un artista laureado por esa generación, ese fue Hendrix (y quizás Neil Young). Después, ese efecto, sin dejar de estar presente, se diluyó. ¿Creéis que la gente se cansó de reverenciar a Hendrix? ¿Los varios lanzamientos discográficos que ha puesto su familia  a la venta han saturado a los fans?

Jorge: No lo sé, la verdad, no sé quien cojones se puede cansar de Hendrix. Es posible que saturasen el mercado en su día, pero de ahí a que la gente no muestre interés…habría que preguntárselo a ellos.

Alberto: Desde luego, la familia ha escudriñado todo lo que ha podido para poder editarlo. Algunas de esas ediciones serán más necesarias o más innecesarias. No me sorprendería que se sacaran de la manga algo más, aunque parece mentira que quede algo grabado que no haya visto la luz. Es posible que haya habido una sobreexposición.

Jose «Pot» Moreno: Umm… Yo, la verdad, no he notado eso. Será que vivo en un mundo aparte, jajajaja… Casi toda la gente que me rodea es fan de Hendrix. Diría incluso, que hay más influencia de Hendrix ahora, con todos estos grupos de neo 70s que han aparecido en los últimos años. Estoy encantado con los lanzamientos de la familia Hendrix; han sacado cosas muy buenas, sobre todo el Miami Pop Festival, al cual estuve muy enganchado. Ahora me gustaría pillar la caja que han sacado con todos los conciertos del Fillmore East.

Soulman Sal (Uncle Sal)

Sal: No creo que la veneración por Hendrix se diluyera como tal ni que hubiera saturación de lanzamientos… Pienso, más bien, que a partir de esa época, y como fenómeno general, el buen gusto por la música de calidad, y el criterio, se fueron a la mierda. Los motivos relacionados con ella pertenecen a estrategias comerciales de la industria musical. Los que adorábamos a Jimi lo hemos seguido haciendo, pero a la gente más joven no le ha llegado su música como nos llegó a los de generaciones anteriores. En cuanto a los lanzamientos discográficos por parte de la familia, obviamente, están exprimiendo los archivos al máximo, y aunque hay muchas cosas prescindibles, también hay material interesantísimo, en especial los directos.

Gonzalo: Desde mi punto de vista, la producción de sus discos no ha envejecido bien, simplemente eso. Yo creo que no se preocupaba tanto de la calidad de las grabaciones como de capturar el momento, y ese sonido, no puede competir con los medios digitales de grabación y producción de hoy en día.

Hendrik: Además de la indudable avaricia de sus herederos, para mí todos esos directos y rarities son exclusivamente alimento para (muy respetables) fans recalcitrantes que se dan cuenta de que en Monterrey, frente a Wight, cambió de sitio la segunda estrofa en tal canción. El último que compré es el de la BBC en el 98. Pero yo no digo nada. Sarna con gusto no pica. En mi caso solamente tengo esa tara con Little Feat.

LG: Con la llegada del nuevo milenio, el panorama cambió y sí que hubo la invasión de rock and roll sueco que tuvo bastante relevancia. Pero ellos miraron más al punk como inspiración y fue algo más underground. En el mainstream, apareció todo el tema del nu metal y demás, y creo igual aparcó un poco el estilo Hendrix. Aunque es cierto que en la década de los 2010 que acabamos de dejar, ha habido oleada de grupos revival, pero no se ha capturado la esencia Hendrix. Todos han mirado más a grupos tipo Sabbath o de corte puramente sicodélico.

James: Supongo que los tiempos se van moviendo y el foco se va posando en otros enfoques artísticos. Las exploraciones de Hendrix ya no forman parte del enfoque general, mucho más genérico y encasillado que la libertad sónica y compositiva que él buscaba. De eso también se encargan las discográficas, la promoción, la prensa. Todas las etiquetas pertenecen a alguien que no compone y solo escribe sobre música y quiere limitarlo y comercializarlo. Hasta que las personas que empiezan a componer están limitadas por las etiquetas que consumen y producen arte encasillado.
Es por eso que entiendo que sea demasiado ecléctico para un público masivo.
La explotación de su familia no creo que esté relacionada con eso.

Duende: Siempre será una referencia y pase lo que pase no se puede borrar eso. Cualquier guitarrista escuchará hablar de él. Cualquiera que escuche buena música tendrá que cruzarse con él en algún momento. Pasará muchas veces de moda, pero Jimi Hendrix es un icono de la historia. Y siempre habrá una película, un libro, o una remasterización, que lo vuelva a aupar a la visión de todos. Tiene un trono del cual es casi imposible despojarlo.

Dani Bañón (Th’ Booty Hunters) – Foto: Cristian Bertolo

Daniel: A mí me han agotado, lo siento. Tú me conoces y sabes que me gusta más que comer con las manos, pero una vez escuchado todo lo que ha ido saliendo, me reitero ante la posición de escuchar sus tres clásicos discos de estudio y tres o cuatro directos míticos. En mi opinión, creo incluso necesario, por el bien de su imagen, que cesen de sacar más material. No tiene sentido. Si un chaval quiere descubrir quien es el tipo ese que lleva su tío en la camiseta y se va a una plataforma digital y por error pulsa en uno de estos discos, no va a seguir avanzado en su música y se va a perder ahí.

Xarim: El mito de Hendrix quedó engullido, como bien dices. Pero también la guitarra eléctrica, en general, pasó a ser un instrumento de otro tiempo. El rock and roll entero, vaya. Ya volverá ese fuego. No será por chispas, al menos.

Raúl: Yo creo que en todo el revival setentero que ha habido en los últimos años, Hendrix ha estado presente. Pero puede ser verdad que su figura se reivindique menos que en los noventa. También creo que mucha gente se preocupa por descubrir a la banda más rara y oscura de los setenta en vez de redescubrir sus discos y sacarle todo el jugo. Él llegó primero, y lo hizo mejor que nadie.

Pepe: No lo creo. Parece increíble que se siga sacando material de semejante nivel. Creo, además, que todo lo que ha sacado su familia no solo merece la pena ser escuchado por completistas, sino que es de primer orden. Hendrix, como relatan en todas su biografías, vivió su vida artística muy rápido, y entre conciertos, nunca dejó de grabar. Si eso no estuviese tan constatado, cabria pensar que hay un grupo de ‘negros’ a sueldo realizando grabaciones y emulando a Hendrix. Pero eso es imposible, ¿¿¿quién pueden hacer eso??? En pleno siglo 21 todavía no hay nadie que pueda emular su sonido sin ser detectado.

Miguel: No se el resto de la humanidad, pero en mi entorno, mis amigos y mis bandas, hemos seguido escuchando a Hendrix. Siempre hay grupos que descubres, nuevos o viejos, y te llevan a él. La música no sería lo que es sin su influencia. En cuanto al nuevo material, hay cosa muy buenas, como el cofre en directo grabado en el Winterland.

Luis: No creo que a los fans nos importe si salen más o menos discos póstumos; al menos yo estoy en otra onda y me quedo con los clásicos. Lo que salga después no cambia en absoluto mi concepción del artista, ni me satura, porque no hago mucho caso. Es verdad que los que fuimos adolescentes en los 90 nos acercamos a Hendrix de una forma distinta a la que puede hacerlo un chaval ahora. Para mí era despejar la X de la ecuación, porque al conocer a Hendrix entendías la mayoría de la música nueva que salía en aquella época. Ahora no tengo esa sensación, creo que las nuevas bandas jóvenes se miran en otros espejos. No creo que Hendrix sea un artista especialmente fácil; no sé cómo se recibirían sus discos en estos tiempos en los que la mayoría del público joven no le concede más de 3 segundos a una canción y pocas veces escucha un álbum completo.

¿Cree alguien que su puesta escénica hizo restar relevancia a su habilidad como instrumentista? Bill Graham, después del primer show con Band Of Gypsys, le dijo algo así: «Has tocado con los dientes, te has paseado la guitarra por la espalda, pero se te ha olvidado tocar «. En mi opinión una cosa no debería colisionar con la otra. Creo que el hecho de que alguien forme un show con sus armas no debería colisionar con lo que realmente importa, que es la música.

Miguel: Bill Graham era gilipollas. Si eres capaz de tocar con los dientes y lo haces tan bien como con las manos, ¿porqué no lo vas a hacer? Y lo de follarte a tu guitarra, bueno…. ¡Creo que lo deberíamos hacer todos! Eso implica pasión en lo que haces, con lo cual, no es un simple espectáculo.

Luis: Discrepo con Bill Graham, si se me permite. Hendrix necesitaba follarse la guitarra, morderla o pegarle fuego. Si no lo hubiera hecho, jamás hubiera sonado como sonaba. Cuando ves esos tutoriales en you tube de gente tocando sus temas con digitación perfecta y replicando nota por nota, te das cuenta de que no han entendido nada. Esas armas eran su forma de tocar; quitarle eso hubiera sido tanto como cortarle los dedos. ¿Te lo imaginas tocando «Foxy Lady» como un palo mirando al mástil o sentado en una banqueta?

Hendrik: Las decisiones escénicas extravagantes suelen nacer, en un principio, de la necesidad de llamar la atención y tienen su punto. Lo malo es cuando el personaje se come al artista y la broma deja de hacer gracia. Quiero pensar que si Hendrix hubiera vivido más, su show hubiera ido cambiando también con la edad.

Jose «Pot» Moreno

Jose «Pot» Moreno: Ni de coña estoy de acuerdo con eso, era su forma de tocar la que lo hizo grande. Da igual que cometiera fallos por eso, su música es el conjunto de todo y Hendrix sin eso no sería Hendrix.

Gonzalo: En mi opinión, eso es lo que le ha hecho traspasar fronteras. Por ejemplo, mis alumnos de guitarra no conocen Nirvana ni Oasis, pero sí saben quién es Hendrix. Y creo que ese es uno de los motivos.

Jorge: Por supuesto que no. Su expresividad y su lenguaje corporal, están totalmente ligados a su manera de tocar. Podría no hacerlo, pero estoy seguro que cambiaría en su forma.

Pepe: Cierra los ojos y escucha su música. ¿A quién le importa la puesta en escena? ¿No tenemos orejas o qué? Hay que estar muy sordo para que su puesta en escena te haya llamado la atención antes que su música. Es la carrera más impecable en la historia de un guitarrista. Enhorabuena para aquél que no haya caído solo por su calidad como artista.

Daniel: Opino que en estudio era donde sacaba el músico, el constructor de canciones y guitarrista, el poeta y la fiera que llevaba dentro. En directo habían varios problemas propiciados por la época que le tocó vivir: uno de ellos era puramente técnico. Seguramente, la falta de PA, monitores y demás, no le dejaron expresarse como quería. Por otro lado, la riqueza de sus canciones más elaboradas, en directo, perdían cierto punch, y creo que, inconscientemente, hacía estos malabarismos para (no diría compensar) expresar ciertas cosas que no podía exponer en directo por falta de tecnología. O eso o la ingesta de ácidos en demasía y sus correspondientes efectos.

Alberto: No creo que haya hoy día nadie con dos oídos y pueda minusvalorar la importancia de Hendrix por esa razón. Por otra parte, habría que valorar qué habría hecho Hendrix de seguir vivo. ¿Habría seguido tocando con los dientes diez o veinte años después? En aquella época todo era nuevo, excitante y transgresor. Por lo tanto, porqué no, también una forma más de destacar y dar que hablar. En realidad, más transgresor que su performance, me parece su actitud creativa. Se abría a todo tipo de influencias y no ponía barreras a la creatividad. Antes de morir tenía como proyecto trabajar con Miles Davis. ¿Qué haría hoy de seguir vivo? ¿Habría experimentado con el hip hop o con la música electrónica?

Sal: Una cosa no interfería con la otra. De hecho, tanto su puesta en escena como su música fueron evolucionando, y me parece igual de interesante su propuesta musical con la Experience, cuando principalmente usó sus trucos de escenario, como su etapa final con Band Of Gypsys, dónde más bien se limitaba a tocar.

James: Como decía antes, él se dividía. En estudio era un artista y productor completamente centrado y obsesivo. Obviamente, le sacaba partido a ser tan explosivo y sexual en directo; pero que yo sepa, en él era natural. En sus propias palabras, se sentía más sí mismo en el escenario que fuera de él. Y como tú dices, no dejaba de transmitir pura música y electricidad, con lo cual, que haga lo que quiera. Recopiló muchos trucos de todos los guitarristas que veía y los juntó con suma naturalidad. También venía de una cultura donde si no tenías algo diferente, o si no tocabas con los dientes en según qué circuitos, podían partirte la cara. Igual que les sucedía a los Beatles en el Cavern si les pedían un cover y no se lo sabían. Todo era más salvaje y se reflejaba en el arte.

Raúl: Estoy totalmente de acuerdo contigo. Leí una vez que Hendrix, después de un comentario parecido al de Bill Graham, tocó el siguiente concierto mirando hacia abajo y sin moverse, y cuentan que tocó mejor nunca. A mí, desde luego, me hubiera gustado verlo siendo el huracán escénico que era, pues el guitarrista y el espectáculo van de la mano.

LG: Precisamente creo lo contrario, pues verás pocos guitarristas que aparte de tocar como dioses hagan su show al mismo tiempo. Eso suma, en cuanto habilidad, y jamás resta. Sé que tocar bien de por sí ya es difícil, pero hacerlo mientras te pones la guitarra detrás de la cabeza o la espalda y das volteretas por el suelo, es aún más complicado. Es una habilidad más que hay que desarrollar, puesto que te estás poniendo obstáculos a ti mismo que te dificultan la ejecución. En resumen, eso hizo más grande a Hendrix si cabe; la imagen de un tipo tocando la guitarra con los dientes está en el inconsciente colectivo como marca de la casa.

Xarim: Toda la parafernalia era fruto de su inseguridad. Eran trucos para impresionar a los blanquitos sin sangre. A medida que fue ganando confianza se centró más y más en el sonido. Creo que se sentía poca cosa, que se juzgaba severamente.

Duende: Lo que cuenta es la calidad de expresión. Si llegas a ella a través de movimientos, notas o pinturas da igual, hay que llegar. El mensaje es lo más importante. Todas las artes que domines las puedes combinar y utilizar a tu favor. Si esto es sincero y original, ¿por qué no respetarlo? Yo estoy a favor de cuantas más formas de expresión tengas en el escenario mejor. Siempre que cuadren con lo que quieras expresar. Jimi Hendrix era un súper maestro en esto.

Pese a lo que comentaba en el segundo punto, no paran de aparecer bandas jóvenes reinventando o revisitando la sicodelia, también el hard blues de finales de los sesenta… En cualquier caso, su sombra, directa o indirectamente, sigue ahí. ¿Lográis ver destellos de lo que él creó en la música actual? ¿Sigue siendo el máximo referente de la guitarra eléctrica en el rock y derivados?

Luis: La verdad es que no lo parece, aunque quizás no miro bien y me cuesta saber cuáles son los referentes actuales. Lo veo todo difuso, aunque sí que veo bandas que intentan sonar a clásicos. Aún así, no me viene a la cabeza nadie que se acerque a lo que hacía Hendrix. Quizá es demasiado personal y difícil de copiar. Aunque seguro que los referentes que tienen los jóvenes ahora, sí miraban a Hendrix. El mensaje puede que siga ahí pero más enterrado, distorsionado y difícil de identificar.

Gonzalo: La mayoría de guitarristas te dirán que Hendrix es el número 1, y eso no pasa en muchas materias.

Raúl: Su influencia está por todas partes, sin duda. No sé si actualmente es el máximo referente, porque últimamente todo está lleno de imitadores de los riffs de Iommi. Le das al play y otra vez, otra banda copiando a Black Sabbath. ¡Qué cansinos!

James: Ciertamente, percibo su influencia a nivel de sonido, pero no como artista compositivamente. En todos éstos géneros revisitantes no encuentro apenas nada de su paleta de colores. Pero sí es obvio que la estela es larga y todos pasamos por él en algún momento y le robamos todo lo posible para continuar nuestra andadura musical.

Pepe: Sin duda, y no solo en los géneros que él practicó si no en otros como el funk o el jazz. ¿Cree alguien que Miles David hubiese grabado Bitches Brew o On The Corner de no haber sido por Hendrix? No. Cuando hoy día escucho un disco como Heaven And Earth de Kamasi Washington, veo la sombra de Jimi.

Alberto: Probablemente no estoy tan inmerso en la música actual (si hablamos de bandas creadas a partir del 2010) como para responder con argumentos a esa pregunta.

Duende: Hay gente que aprenderá a tocar y tendrá su influencia, y tan siquiera serán conscientes de ello. Pero muchas de las técnicas o visiones le llegarán dadas porque habrá aprendido lecciones basadas en él. No puedes aprender de tu maestro, si tu maestro no aprendió de su maestro. O sea, que directa o indirectamente, eso destellos se notan en todas las bandas de rock. Como icono y referencia es prácticamente imposible alcanzarlo.

Xarim: Hendrix contribuyó a que la Fender Stratocaster fuera la guitarra eléctrica por antonomasia. Pero escucho por ahí más imitaciones de sus imitadores que de él mismo. La música se ha paganizado. Hendrix tocaba desde una conciencia cósmica, divina.

Jorge: Sí. Para mí es una de las grandes referencias históricas. Sea directa o indirectamente, ha influido en todo lo que se ha hecho en el rock después de su muerte hasta hoy día. Veo implícito a Hendrix en gente como Ed Mundell, Mike McCready, Luther Dickinson, Marc Ford o Ben Harper.

LG: Un grupo que destila esencia Hendrix en su música son Dewolff. La versión de «Medicine» que se marcan en el Live & Outta Sight II es un blues que bebe del legado Hendrix en cuanto a estilo guitarrístico se refiere.

Miguel: No es el referente como sí lo fue en los 70,80 y 90. El puto indie se apoderado de la guitarra moderna y parece que tocar la misma nota una y otra vez, con cara de idiota, es lo que mola. Pero seguimos quedando un puñado de Renegados y viejos creyentes del rock para reivindicarlo. También creo que hay chavales jóvenes adoradores de Hendrix, quizá no tanto como antes, pero haberlos los hay.

Sal: Creo que todo músico de rock que aparezca sobre la faz de la tierra tendrá a Hendrix como uno de sus referentes, al menos como icono y mito de la música. No deja de seguir figurando en todas las listas como el mejor guitarrista de rock de la historia, y tal y como vienen las cosas, dudo que en adelante nadie logre desbancarlo. Jajaja.

Daniel: Absolutamente, todo lo que conlleve un amplificador marshall y un fuzz tiene su nombre dentro.

Jose «Pot» Moreno:  No creo que sea el máximo referente de la guitarra eléctrica hoy en día, aunque siga siendo uno de ellos. En los últimos 20 o 30 años, creo que el guitarrista más influyente para el metal y el rock clásico, es Tony Iommi.

Hendrik: Riffs tipo los de «Spanish Castle Magic», «Stone Free» o «Purple Haze», son muy inspiradores y golosos para cualquier chaval que se inicie en el asunto. Otra cosa es que las propuestas basadas en esos sonidos consigan salir de las sombras. Pero estar, está.

La tercera y última entrega llegará en unos días. Por lo tanto, continuará…

Texto: Sergio Martos

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