“Las Palabras Vividas” es un disco elaborado al alimón entre Quique y Luis García Montero (el primero, poniendo la música y, el segundo, las letras), fruto de una amistad que une a los dos artistas desde hace años. Es un álbum que rezuma sentimiento, delicadeza pero, sobre todo, buen gusto. Pues bien, tras la publicación del disco, el madrileño se encuentra inmerso en una gira que lleva por título el mismo nombre. Con una banda renovada, aunque con referentes de casi siempre (véase, Jacob al bajo), Quique parece disfrutar de un momento de madurez sobre el escenario. Cada detalle estético y melódico está cuidado al milímetro, aunque sin perder la frescura que todo concierto de rock precisa.
La parte inicial del concierto estuvo protagonizada por los temas más recientes. Comenzó con “Bienvenida”, tema dedicado por García Montero a Nora, la joven hija de Quique, y con “La Nave de los Locos” Quique se atrevió, cual director de orquesta, a dirigir a la banda en sus cadencias y golpes de efecto. Tras “Sangre en el Marcador”, que la banda disfruta mucho, González dedicó “Palomas en la Quinta”, del ya clásico “Kamikazes Enamorados”, a sus amigos de toda la vida, del barrio, con los que se ponía hasta reventar de comer helados mientras veían parejas follar. Escuchar en vivo “Polvo en el Aire” es siempre una experiencia mística, donde los versos finales cambian en cada ocasión. Además, ésta fue una de las pocas ocasiones en que Quique toca la armónica en esta gira, instrumento que domina a la perfección. Otro tema que el madrileño parece disfrutar mucho es “Su Día Libre”. Sin lugar a dudas, no nos cuesta imaginárnoslo viviendo la historia que la canción narra. Personalmente, el momento álgido del recital fue cuando interpretó “Fiesta de la Luna Llena”, un tema aparecido en “Pájaros Mojados”, que expresa ganas de vivir sin perder el tono socarrón e irónico que impregna todo el disco. El público se animó especialmente (por favor, dejen de aplaudir mientras se interpreta) con “La Luna Debajo del brazo” y un momento muy especial vino dado por la aparición de García Montero para recitar su “Aunque Tú No Lo Sepas”. El fin de fiesta, fue como acostumbra desde hace tiempo: “Y Los Conserjes de Noche”, “Salitre” y “Vidas Cruzadas”, con todo el Circo Price en pie.
Quique González es un referente del rock patrio, por su calidad, por su coherencia, por su entrega, tras más de dos décadas en esto. Ahora empieza la segunda parte de la gira y algunos ya estamos pensando en la siguiente.
Texto: Pepe Maza
Foto: Juan Pérez Fajardo
