Gran ambiente previo en los alrededores de la sala, y no era para menos, el triple cartel encabezado por Mayhem apuntaba como una de las grandes veladas blackmetaleras de la temporada. Y visto lo visto, y escuchado lo escuchado se puede afirmar que todas las expectativas se cumplieron. Pero vayamos por partes con la temprana aparición en escena de los excéntricos Gost. El dúo que combina electrónica, synthwave y metal extremo estuvieron poco rato sobre las tablas, pero gustaron al ya abundante público que había accedido al recinto. Puesta en escena siniestra y electrónica muy dura les validaron como proyecto a tener en cuenta y que encajó sin problemas en el triple cartel. Y lo que ya puso a los asistentes a tope fue la soberbia actuación de Gaahls Wyrd. No era mi primera vez con el polémico ex vocalista de Gorgoroth, así que ya sabía lo bien que funciona en escena. Pero lo que ofreció superó mis expectativas, Gaahl lleva el black metal a otro nivel con su inquieta propuesta musical, convirtiéndose –y no creo que exagere- en el Nick Cave del metal extremo. Carisma a destajo, puesta en escena demoledora, sonido impecable y un aura de tipo especial hicieron de este concierto una exquisitez extrema. Combinó los temas de su último álbum Gastir – Ghosts Invited con clásicos de sus bandas previas. Donde destacaron la alternativa «Carving The Voices», «Alt Liv» y la final e inapelable «Exit Through Carved Stones» de Gorgoroth.
Concierto incontestable por parte de un tipo que a día de hoy es uno de los personajes más especiales e interesantes de la escena extrema. Y fácil no lo tenían Mayhem para estar a la altura de lo ofrecido por Gaahls Wyrd, y más tras la titubeante visita de hace dos años que nos dejó un poco fríos. Pues pareció que habían aprendido de sus errores y salieron a por todas desde el primer momento. Con su habitual arrogancia (conscientes de que son una leyenda) y sin apenas comunicación con el público empezaron a encadenar una canción tras otra. Y el público respondió ante esta exhibición de oficio y agresividad, y aunque fueron las canciones del clásico De Mysteriis Dom Sathanas las que se llevaron la parte del león, también hay que reconocer que las contenidas en el recién publicado Daemon fueron recibidas con bastante algarabía. Y no es para menos, Mayhem dejando de lado su pasado truculento son una banda que siempre ha mirado hacia adelante y canciones nuevas como «Invoke The Oath» o «Malum» cuajaron más que bien entre el público. Con repaso a su discografía comandado en escena por el carismático vocalista Attila Caesar y tras un breve interludio Mayhem acabaron de meterse al público en el bolsillo cuando atacaron su material más primitivo e hiriente caso de «Deathcrush» o «Chainsaw Gutsfuck». Tras noventa minutos el final llegó con esa declaración de principios que lleva por nombre «Pure Fucking Armaggedon». Esta vez sí, ninguna pega y Mayhem volvieron a demostrar que a pesar del lastre extra musical que llevan encima están en la cima del black metal por méritos musicales propios, y la cosa no da visos de que vaya a menos.
Texto: Xavi Martínez
Fotos: Josep Mª Llovera
