Encuentros

Daughters empiezan hoy gira

El regreso de los noise rockers de Providence (Rhode Island) ha generado un sinfín de alabanzas a su último álbum. En el hay hostilidad, extrañeza, tensión y unas canciones cuya arquitectura no parece de este mundo, convirtiendoles en alquimistas del horror absoluto que repta bajo el asfalto de toda ciudad. Hoy se embarcan en una nueva gira que les acercará a: 10/10 AM Festival (Barcelona); 11/10 Dabadaba (San Sebastián) y 13/10 sala Cool (Madrid, XV Aniversario 981Heritage SON Estrella Galicia).

Cualidades como la personalidad o ese estulto atributo que es la originalidad, la cual sin más agregados de enjundia suele ser inútil, son cada vez formas raras de ver, y no solo en el rock. Raras, y casi extintas. He aquí, el último disco de Daughters You Won’t Get What You Want (2018) para enmendar algo esa falta, un hype unánime sí, pero he ahí lo inédito, que está justificado. You Won’t Get What You Want tiene mucho de pica en Flandes. Su destilado de, a primeras tres obvias influencias; Swans, Jesus Lizard y Birthday Party, aunque hay tuercas en su andamiaje que han sido adquiridas a Suicide o Einstürzende Neubauten, se sumergen en ese acercamiento a la suma de rock’n’roll y ruido desde un asalto inaudito. Extremo sí, pero sorprendentemente accesible a pesar de lo sofocante y absorbente del conjunto.
Chirriantes guitarras repetitivas, voces siempre al borde del esputo desafiante y una base rítmica que los encierra con un andamiaje austero y sin artificios.

Alexis Marshall y Niccholas Andrew Sadler, cantante y guitarrista respectivamente, responden desde el otro lado.

No puedo evitar preguntaros por lugares que os gusten de Providence, H.P Lovecraft era de allí, y parte de su forma de proponer horrores casi abstractos por su desconocido origen, tiene puntos en común con la confusión y desasosiego que crea vuestra música. ¿Si alguna vez visito Providence, qué lugares debo visitar? Sin obviar la tumba de Lovecraft.

(Nick) El cementerio de Swan Point es donde está su tumba, es muy recomendable ir con tiempo y perderse por allí. Pero te voy a nombrar unos cuantos que no desentonen con ese. La casa de Lizzie Borden, que actualmente es un bed & breakfast con tienda de regalos.
Otro cementerio a visitar, es el de Chestnut Hill. Allí está enterrada Mercy Brown, a la que después de muerta exhumaron y quemaron su corazón por qué decían que era un vampiro.
Y en los alrededores de Providence, puedes ir a visitar la granja donde sucedieron los hechos que salen en la película The Conjuring. Osea una granja “encantada”. Y si tienes tiempo, a hora y media está el memorial de los juicios a brujas de Salem y puedes terminar el tour visitando la tumba de GG Allin en el cementerio Saint Rose en Littleton.

Volvamos a vuestra decisión de reuniros y como habéis solucionado los problemas entre vosotros. ¿Os pusisteis alguna condición?

(Nick) La espiral de autodestrucción de Alexis y el contexto eran combustible para el caos. Ahora queremos vivir nuestras vidas fuera del contexto de estar en una banda, los problemas los hablamos directamente, las estupideces y lo que no es importante lo dejamos pasar. Y como única condición nos pusimos, que nuestro regreso debía venir acompañado de nuevas canciones y un nuevo álbum.

(Alex) Pasábamos mucho tiempo en la carretera, sin saber muy bien hacía donde nos dirigíamos como banda. Yo pasaba la mayor parte del tiempo borracho, y algo que es parte de nuestro show, que es nosotros enfrentándonos al público donde; me escupen, me golpean, me agarran y me intentan romper la camisa, se había extendido a mi forma interactuar con los demás. Ahora estoy sobrio, algo que me daba miedo cuando volvíamos a tocar en directo. Pero ya no, ahora va todo genial.

Sobre vuestro último disco parece haber un consenso al respecto.

(Alex) A veces los consensos no funcionan, por ejemplo a la hora de terminar “Ocean Song” no lo hubo. Y quedo genial.

(Nick) Aunque no leo mucha prensa musical, mentiría si dijera que no me gusta recibir buenas críticas. Cuando tocamos en el Roadburn y me dijeron antes de salir a tocar que habían 3000 personas esperando nuestro show, dije; no puede ser cierto, esto no es real. Y sigo sin aceptarlo, creo que es bueno tener presente que todo lo que Daughters ha conseguido ha sido como equipo. Y te aseguro qué discutimos mucho entre nosotros a la hora de hacer una canción.

Tu forma de cantar ha cambiado en este tiempo acercándote cada vez más a un David Yow de The Jesus Lizard más tenebroso o el Nick Cave de Birthday Party.

(Alex) Gritar solamente dejo de ser interesante. No puedo negar que esas influencias son obvias en mi forma de cantar. Pero me centro en interpretar las canciones. Sé que hay un montón de ruido y capas en ellas, pero intento dotarlas de humanidad con mi interpretación, que se me escuche respirar exhausto o fuera de tempo, creo que le dota de un interés más allá de unos tipos tocando canciones sin más.

Sois una banda que ha vivido la transición del impacto de Internet en el negocio de la música. ¿Como lo ves?

(Nick) En realidad nos separamos cuando las plataformas de streaming comenzaban a despuntar. Durante nuestra primera época no vimos mucho dinero, es más, perdimos bastante. Soy consciente que tras separarnos Internet facilitó una especie de “culto” sobre Daughters. Aunque reconozco, que aunque vaya a conciertos de grupos nuevos y esté atento a las novedades, me siento totalmente fuera de la escena musical en 2019. Todo ha cambiado mucho.

¿Como es un show de Daughters en la actualidad sin la disipación y violencia politoxicómana, que parecía envolver vuestra actuaciones previas a vuestra separación? Por qué no tiene pinta de ser un concierto al uso.

(Alex) El título del disco va un poco de eso. Con el historial que tenemos a nuestras espaldas, el publico espera que me desnude o les pote encima, y parece que si eso no sucede se van decepcionados a casa. Lo que quiero que sepan es que no somos ni un jukebox, ni un video de You Tube. Tenemos noches buenas y noches malas.

Texto: Iván López Navarro

Fotos: JVP Photo and video

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Contacto: jorge@ruta66.es
Suscripciones: suscripciones@ruta66.es
Consulta el apartado tienda

Síguenos en Twitter