Siempre hemos admirado las propuestas valientes. Y es que con los tiempos que corren donde una gran mayoría se dedica a pasar de puntillas por la vida sin asumir el más mínimo riesgo, hay que premiar a aquellos que se sitúan en primera línea y actúan en consecuencia. No es sencillo organizar un festival de música. Menos si es de rock. Y aún menos si se apuesta claramente por el producto nacional que está al margen de los circuitos de difusión convencionales y que no cuenta con el amplio apoyo de los medios de difusión como las propuestas de laboratorio diseñadas para el mainstream en su amplio sentido. Pues bien, hacerlo, y hacerlo bien, de forma consecutiva durante nueve ediciones es digno de aplaudir y reconocer fehacientemente.
Eso es Pintor Rock. Un festival de otroño. Una cita donde se congregan grandes bandas de la escena nacional con otras propuestas incipientes e incluso bandas de menor repercusión mediática pero con seguimiento fiel e incondicional de muchos amantes del rock manufacturado en este país.
Si a todo eso se le suma una indudable voluntad de compromiso social, sin connivencias hacia lo injusto y sin esconder unos valores claros y determinantes, el Pintor Rock se convierte sin duda en uno de los festivales con mayor carácter y personalidad de la temporada.
Distancias entre zonas de acampada y conciertos correctas, precios contenidos, servicios mejorados, etc parecen garantizar una experiencia festivalera de lo más disfrutable.
La propuesta musical sigue creciendo año a año, con un equilibrio sostenido entre grandes nombres de siempre con otros que están en un momento de especial dulzura.
Ahí estarán Def con Dos, Ska-P, S.A., Crim, Narco, The Baboon Show, EUKZ o Koma entre otros descargando rock y actitud durante más de 14 horas diarias los próximos 31 de octubre, y 1 y 2 de noviembre en El Morell, Tarragona.
Una fecha marcada a fuego en el calendario de muchos que promete seguir consolidándose y animando la época pre-invernal de la parroquia rockera.
Texto: David Lage
