Cole Withers ha publicado un disco magnífico titulado The Last Bookstore, peor poca gente se ha dado cuenta o ha querido darse cuenta a este lado del Atlántico. Un álbum de genuino rock americano, cantado con una extraordinaria voz y plagado de excelentes canciones a cargo de este músico afincado en los Ángeles que responde nuestras preguntas.
Un disco fantástico, en la línea de la mejor tradición estadounidense.
Gracias. Hicimos lo que pudimos. Creo que las canciones se colocaron por sí mismas. Traté de construir una historia que empieza con remordimiento («Wash away») y acaba con la esperanza y la emoción de encontrar el amor («Heartbeat away»). Estoy muy orgullosos de las canciones que escribí y de las contribuciones de Steve y el resto de músicos.
Me recuerdas bastante a Bob Seger.
No es la primera vez que me lo dicen. Oigo esa comparación con frecuencia y para mí es todo un honor.
También leí que eras el “Van Morrison del siglo XXI” ¿qué piensas de esa afirmación?
Me sentí halagadísimo y pensé “por fin alguien se da cuenta”. Es una de mis mayores influencias. Ojalá tuviera su voz. Él es un poeta y yo soy más un cuentacuentos. Vocalmente siempre me he fijado en Van Morrison, Joe Cocker o Peter Gabriel, mientras que a nivel de escritura lo hago más en Bob Dylan o Bruce Springsteen. Las historias que cuento a través de las canciones tienden siempre a reflejar la experiencia norteamericana. Después de todo siempre me he inclinado por escribir sobre lo que sé, y soy un compositor norteamericano.
Me sorprende lo de Morrison, porque nos e ver lo de la influencia británica en tu música.
Pues te equivocas. La mayor parte de mis influencias son europeas. David Bowie, Brian Eno, roxy Music, Joe Cocker, Van Morrison, Peter Gabriel…Me encantaría ser capaz de hacer un disco como So de Peter Gabriel o Astral Weeks de Van Morrison. Me gustan también disco de Springsteen como The Wild, The Innocent & The E Street Shuffle o Born To Run, peor mis mayors referents son europeos. Incluso soy fan de Verdi, Montserrat Caballé, Plácido Domingo y El Greco ¡todos europeos!
El disco se publica con tu nombre, pero ¿es esto un proyecto de grupo?
Bueno, yo soy Cole Withers, escribo las canciones, pienso as melodías, creo la imagen. Steve es mi socio y productor. Tenemos un maravilloso bajista y estamos reuniendo a los mejores músicos para presentar el disco, pero especular cuanto tiempo formarán parte del proyecto es demasiado. Lo cierto es que todo empieza y termina conmigo y Steve, por eso salimos juntos en la portada.
¿Me explicas más a fondo la influencia de Steve Desterhaft en este disco?
Él es ese hermano mayor que nunca tuve. Es un genio musical. Sabe cómo coger una letra y una melodía y convertirlas en una experiencia cinematográfica sonora. Crear ancho y profundidad. He trabajado con muchos guitarristas y ninguno trabaja el corazón de una canción como Steve. Eso es un regalo, para mí. Él aporta la profundidad emocional para que coincida con al vocal y lírica. El disco suena como suena gracias a Steve. También me gusta el hecho de que nuestras influencias difieren, cosa que hace nuestros estilos complementarios.
¿Por qué has estado dos años grabando el disco? Mucho tiempo ¿no?
Bueno, no es del todo exacto. Hemos estado tocando juntos dos años, pero el disco se grabó en un mes. Ensayamos 10 canciones y las tocamos en vivo tres meses. Luego entramos en el estudio a grabar la música y estuvimos dos días. Luego más tarde grabé las pistas vocales. Creo que tardamos unos tres meses en tener el disco masterizado.
En tus canciones hay mucho remordimiento y nostalgia ¿te gusta escribir sobre ello?
Sí. Me gusta escribir sobre experiencias humanas y eso incluye remordimiento, nostalgia, anhelo y amores perdidos. Nuestro próximo single es «Fall in love tonight» que habla sobre la necesidad de conexión. Creo que es lo que todo el mundo quiere en estos tiempos. Vivimos en un mundo irónico: Internet nos conecta a todos, y nos desconecta al mismo tiempo. La música trasciende todo eso.
Y el título ¿es un homenaje a la literatura?
The Last Bookstore es una tienda real de Los Ángeles. Las librerías me salvaron la vida cuando crecí en Nueva York. Iba allí a soñar, aprender, enamorarme. Las librerías y los libros están desapareciendo y creo que la sociedad sufrirá por ello. Claro que podemos pedir cosas a Amazon, pero perdemos el mirar los estantes, sentarnos en el suelo y leer ese libro que no podemos permitirnos…Sí, es un homenaje a la literatura. Podría haber usado «Voltaire» como la canción ¡otro europeo!
Para acabar ¿vendrás a Europa a presentar el disco?
Si Europa me quiere, allí estaré. Pero no hay nada peor que un invitado no invitado ¿verdad?
Eduardo Izquierdo
