Este joven dúo de Los Ángeles sigue creciendo, apostando por una particular visión del dream-pop a veces densa, otras flotante. Siempre gratificante. En este tercer largo exhiben confianza, a base de canciones bonitas a la par que inquietantes, apoyadas en un registro sonoro limpio y a su vez pesado. Todas estas contradicciones, perfectamente equilibradas en una u otra dirección, dependiendo del momento; siempre en pos de lo que resulte mejor para la canción. Resaltar también el buen trabajo vocal, mayormente compartido por ambos, un sonido de guitarras reconocible que no rehúsa la psicodelia y unas progresiones de acordes que nos retrotraen a la vieja Costa Oeste, pero también nos acercan al Kurt Vile más relajado. A veces riegan sus tonadas con ligeras programaciones electrónicas, mostrándose fantasiosos, ensoñadores. Otras, se aplican con esmero, imprimiendo una mayor pegada. Siempre acertando en el cómo y sin fallarles el instinto melódico. Resulta curiosa la aparente sencillez con la que visten la complejidad de «Lucky Joke». Nos hacen flotar en niebla sintetizada a través de «Minute On Your Mind». «Where You Sink» puede gustar a fans de Blonde Redhead. «Pretty» está a la altura de lo mejor de Snail Mail… Un disco rico, sobretodo por su capacidad para transmitir estados de ánimo de lo más variados.
DANIEL GONZÁLEZ
