El cuarteto valenciano presenta en este 2019 su nuevo álbum Rioflorido. Once temas de rock reposado con los que amenazan con volver fuerte a los escenarios, dos años después de la publicación de su debut Ventura. Hoy sale a la luz el videoclip del tema ‘Volver a casa’ a modo de adelanto, pero el 1 de marzo ya estará disponible el disco completo.
¿Qué evolución habéis notado con respecto a vuestro primer álbum?
Decimos que hacemos un rock reposado porque hablamos de unas composiciones muy sentidas. Venimos del rock, pero hay mucho equilibrio melódico para cantar de manera agradable las cosas que contamos. De repente, esas canciones que se hicieron sin más necesidad que la de vomitar algo personal, se convierten en algo que ya no solo nos pertenece a nosotros sino también a un público que antes no estaba y ahora se hace notar. La evolución de este disco es algo más de potencia sonora en sus canciones, un poco más de leña al fuego para disfrutar los directos con nuestra gente. Creo, además, que tienen un contagio más inminente.
Los primeros temas de Santero los compuso Miguel Ángel de manera individual ¿la cosa sigue siendo así o en este disco hay una mayor colaboración?
En su mayoría sigue siendo así, pero esta vez hay aportaciones por parte de otros. He puesto letra a dos temas de Joseman, Soni cierra el disco con una instrumental y, para no perder la costumbre, cogimos un tema de nuestro padre, Pepe Escrivá. La canción se llama “He de Olvidarte” y decimos que es algo así como un Rock Ye-Ye. Él la hizo allá por el 65 y la tocaba con uno de sus grupos llamado Los Ángeles Negros. También la grabó Adam Group en inglés en esa época y existe un clip muy total flotando por internet. Nosotros le dimos unas cuantas vueltas hasta conseguir lo que pensamos que es un buen momento en el nuevo repertorio.
¿Consideráis que los coros son algo que define vuestro estilo musical?
Así es, es una escuela inevitable que nos viene dada por él también, y los grupos que más hemos escuchado.
De las once canciones del disco ¿hay alguna por la que tengáis predilección o que os guste más por lo que os transmite?
Cada uno tiene su opinión. La mía se va con la canción con la que abrimos el disco, “Estamos Bien” porque representa como pocas el verdadero rock reposado. Camina bien, con sutileza y matices, tiene un baile de esos de cuello sin tener que moverte demasiado. La letra, además, maneja códigos del rock que todo el mundo conoce, y es que hablar de lo que ya sabemos, cómo están las cosas y las sentimos nos encanta en el rock. Además de tener pinceladas muy personales.
¿Por qué grabar en un palacete deshabitado del s. XVIII? ¿Cómo ha sido la experiencia?
Es un lugar que salió al paso. Un seguidor muy allegado nos abrió las puertas de este lugar deshabitado. Vimos claro que era perfecto dada la fase creativa en la que estábamos. No sólo se compuso, sino que allí se grabó también. Entramos en enero de 2018 y ahora, un año después, nos toca abandonarlo, esa era la condición. Teníamos nuestras dudas para grabarlo allí mismo, pero cuando citamos a Manuel Tomas, el ingeniero y coproductor del disco, vio claro que debíamos intentarlo al menos.
El título del disco es en honor al primer marqués que habitó en ese palacete ¿verdad?
Un día leyendo algo sobre la historia del lugar apareció su nombre, Rioflorido. Me gustó su sonido, le vi muchas conexiones también en el significado, pero ante todo era como cerrar un círculo ya que él fue el primero y hasta hoy, nosotros los últimos. Escribí a la banda y fue prácticamente unánime, teníamos el título.
En cualquier caso, ¿qué os transmite ese marqués para dedicarle el nombre del álbum?
Ni este, ni ningún marqués nos transmite nada en absoluto, pero ese lugar sí que lo hemos palpado y es alucinante haber estado allí. Su aire, su sonido, sus escalinatas crujientes son algo que existen porque alguien como él decidió habitarlo allá por 1785 y la energía que ha perdurado, fruto de tantos años, la hemos absorbido nosotros está vez convirtiéndola en algo para escuchar.
Carla Fuentes, que es una reconocida ilustradora, se ha encargado de toda la parte artística de vuestro nuevo álbum, incluso convivió con vosotros en ese palacete ¿quién contactó con quién?
Para nuestro asombro fue ella quien se puso en contacto con nosotros. Sabíamos quien era porque es alguien que ahora está fuerte en su trabajo, es popular, así que nos gustó saber que no sólo nos conocía, sino que había venido a algún concierto y le gustaba lo que hacíamos. Carla es muy ágil en su imaginario, y fue y está siendo muy productivo y chulo trabajar con ella.
También contáis con el guitarrista Twanguero en algunos temas ¿cómo surgió esa colaboración?
Diego y yo nos conocimos levemente en México años atrás coincidiendo en el festival Vive Latino. El año pasado volvimos a coincidir en Madrid y hubo todavía más conexión. Él es valenciano también, y aunque vive en Los Ángeles dejamos pendiente un cameo en un tema del disco para cuando pasara por Valencia. Fue divertidísimo el día que pasamos con él, paella incluida.
Texto: Bárbara Castro
Foto: Carla Fuentes
