Tras el parón provocado por las navidades recuperamos algunas secciones, como esta que nos lleva esta vez hasta la figura de Nick Gusman.
Asegura este tipo de Saint Louis que sus grandes influencias, aparte de enormes figuras como Bob Dylan o Tom Petty, son Todd Snider y Robert Earl Keen. Nombres, todos ellos, que se reflejan en las catorce canciones que integran su primer lanzamiento, el autoeditado Dear Hard Times.
Lo cierto es que el disco es un excelente trabajo de música de raíces, en el que Gusman se muestra como un magnífico letrista que combina perfectamente imágenes cotidianas con pensamientos internos sobre todo aquello que le rodea, convertido en un certero cronista de todas las contradicciones del ser humano. Gusman, que ahora tiene 33 años, empezó a tocar a los 19 con una guitarra de un vecino que solo tenía tres cuerdas y, aunque llegó tarde a algunos referentes, su música es la muestra de que estos han llegado para quedarse. Y es que Nick confiesa que llegó a Bob Dylan a través de un recopilatorio de Starbucks y que tras preguntarle a un amigo si había oído algo de él, este le dijo algo así como “sí, a la gente le gusta pero no creo que a ti lo haga. No es tan buen cantante” ¿Quién iba a decir a Gusman entonces que acabaría inducido en el dylanismo o que haría un disco tan influido por el de Duluth como Dear Hard Times? Cosas de la vida. Eso sí, anécdotas de lado, no duden en acercarse a él.
Eduardo Izquierdo
