Nashville Pussy – Pleased to Eat You Ear (Music-Top Artist)

A todos nos caen bien Nashville Pussy, imposible no sentir simpatía por ese dúo formado por Ruyter Suys y el incombustible Blaine Cartwright. Algunos de sus directos los guardo en la memoria como alguna de esas inolvidables veladas de puro y simple rock’n’roll pero reconozcámoslo, en vinilo siempre han flojeado. No tienen un disco incontestable, de todos ellos podemos arrancar unos cuantos buenos pepinazos directos a la boca del estómago, pero no poseen un título al que se le pueda colgar la etiqueta de imprescindible. Su nuevo trabajo sigue por esa misma senda de grasiento y ruidoso southern hard-punk con esos habituales himnos para corear en sus bolos cerveza en mano, pero, definitivamente, ninguno de ellos va a pasar a la historia del género. Escuchamos «We Want a War» con su enganchoso estribillo y es inevitable que tu ánimo se venga arriba, será un nuevo clásico en sus bolos, fijo. La guitarra de Ruyter sigue sonando punzante, desgarbada y sucia cuando ataca uno de esos riffs marca de la casa con gusto clásico pero actitud punk. Pero es al viajar al Sur cuando consiguen sus mejores resultados. Como ejemplo ese boogie-rock llamado «Low Down Dirty Pig» que es sin duda, por su brevedad y contundencia, uno de los puntos álgidos del álbum, y la cadencia blues de «Endless Ride» también raya a gran altura. Los seguiremos amando a pesar de que resistan a entregarnos su obra definitiva, al fin y al cabo el escenario es su hábitat preferido y ahí, amigos, nunca decepcionan.

ANDRÉS MARTÍNEZ