Siempre es una excelente noticia recibir la noticia de la aparición de una nueva aventura editorial. Y más cuando en el caso de Libros del Kultrum se centran específicamente en libros de rock. Se estrenan con una fantástica edición (592 páginas y sólo 22 euros) del clásico de Lester Bangs, uno de los críticos más kamikazes, influyentes, peligrosos, pero también con un gran sentido del humor.
El libro ha sido editado por otro célebre crítico que tomó su testigo como es Greil Marcus. El remate lo pone la excelente traducción de uno de nuestros más grandes críticos de rock de la historia, Ignacio Juliá, fundador de Ruta 66. El Kultrum o Cultrún es una expresión de la cosmogonía araucana que se une a la tierra en forma de instrumento de percusión para la mujer chamán.
Original nombre para una editorial que tiene la idea de publicar mensualmente un libro y en la que tendrán cabida también prestigiosas firmas femeninas, tanto como autoras como a la hora de las/os artistas a tratar. De hecho si te pasas por su web, www.librosdelkultrum.com, descubrirás que en este mismo noviembre sacarán Víctima De Un Hechizo, unas apreciadas Memorias de la gran Nina Simone. La primera y de las más grandes mujeres en aparecer, y no solo musicalmente. Antes de fin de año llegará también Hipsters Eminentes, a cargo de uno de los mayores hipsters y genios musicales de la historia, Donald Fagen. El Steely Dan nos entrega aquí una especial Autobiografía y el Diario de una Gira especial a un mismo tiempo. Otra memorias que pueden tener auténtica tela son las de Gil Scott-Heron, Con Las Horas Cantadas. Y como regalo de Reyes llegará un especial Cancionero Ilustrado del mismísimo George Harrison titulado I. Me. Mine.
Centrándonos en este debut, decir que Lester Bangs se formó escribiendo y revolucionando la revista Rolling Stone hasta que Jan Wenner lo despidió por su salvajismo a la hora de escribir. No se casaba con nadie y no le importaba despotricar contra The Clash, David Bowie, Kraftwerk, John Lennon, Lou Reed, John Coltrane o Iggy Pop, aunque fueran sus ídolos. Luego fue editor y redactor de la estupenda Creem en Detroit y acabó sumergido en el punk de Nueva York, antes de fallecer en 1982 por una gripe a los 33 años, pero tras una vida salvaje marcada por el rock’n’roll y los excesos de dicho mundo.
Aquí tenemos varios de sus mejores escritos con su toque excéntrico, con su acrobática prosa y con su increíble sentido del humor y la violencia. No se vendió nunca y pagó en muchas ocasiones por su dura franqueza, pero, quizás por ello también, ha pasado a la historia como uno de los críticos más influyentes a pesar de fallecer a tan corta edad. Coger este pedazo de libro de tan original presentación y sumergirse en textos como los del relato que titula el libro u otro similar referido al Astral Weeks de Van Morrison es una auténtica gozada. Los artículos de Creem sobre Chicago, James Taylor, Black Oak Arkansas, John Coltrane, The Guess Who, Jethro Tull, Slade, J. Geils Band,, Barry White, Kraftwerk o el Station To Station de David Bowie, tampoco tienen desperdicio. La Cuarta Parte del libro se titula Matando Al Padre y está íntegramente dedicada a Lou Reed. El otro capítulo más extenso es para The Clash y se va por encima de las 50 páginas. La Sexta Parte lleva el nombre de Impublicable, pero es impagable. Escritos sobre PIL y su Metal Box, Maggie May o Lost Highway. Journeys & Arrivals of American Musicians. La Séptima (y última) Parte se titula, valga la redundancia, Sin Título y también tiene buenas curiosidades. Todo el libro, además, guarda una buena estructuración cronológica para seguir su evolución, aunque esta fuera muy anárquica.
Texto: Txema Mañeru