La musa pelirroja del indie-rock, deja de danzar descalza entre las nubes y baja a la tierra para sumergirse en sus propias heridas. En High as Hope, su cuarto elepé, se muestra más sincera y vulnerable que nunca. Ya en el primer adelanto, «A Sky Full of Song», nos mostró el desgaste de llevar tanto tiempo volando y la necesidad de que el público la ayude sosteniéndole los tobillos. Se sacude el barroquismo de sus primeros trabajos, encontrando la liberación a corazón abierto de camino a casa. Recorre las calles de su adolescencia en «South London Forever», con la sangre hirviendo y la sombra de su madre. Le dedica «Grace» a su hermana, con Sampha al piano, iluminando la nostalgia a cada tecla, entre percusiones y estallidos corales marca de la casa, mientras desborda la épica vocal que le corre por la venas. El poder femenino sigue fluyendo por los surcos del groove de «100 Years» y la vibrante «Patricia», dedicada a su admirada Patti Smith. Emile Haynie firma la elegante producción, junto a la misma Florence Welch. La estrella invitada que más brilla es Kamasi Washington, encargándose de los arreglos de viento de todo el álbum, además de sacarle brillo a su saxo en más de una pista.
DAVID PÉREZ
