Habría que dedicar un día de estos un extenso artículo a Alive Natural Sound, la disquera con más capacidad de sorpresa y aciertos del extenso mercado del underground actual. Su catálogo es vasto y variado y, salvo escasas excepciones, preñado de excelentes nuevos valores que siguen empeñados en cerrar la boca a todo aquel que sigue pensando que todo esto acabo en los sesenta. Beachwood no van a cambiar el mundo, de hecho, su sonido es un amalgama de psicodelia, pop, glam-rock y pospunk que no resulta nada original, pero sí tremendamente adictivo. Y esa pegajosa adicción viene dada por una colección de canciones impecables, impolutas, de áspera ejecución pero de preciosista sustancia, perfectamente trabajadas y magníficamente producidas. Habíamos escuchado ya a The Nomads o Camper Van Beethoven acercarse al súper clásico de The Kinks «I’m Not like Everybody Else», pero sinceramente, la recreación que realiza el trío neoyorquino de semejante gema es magistral, pero no nos quedemos con una versión. «I Don’t Wanna Be the One You Love» incorpora un toque a lo Television primoroso, con esa guitarra sonando amenazante y extremadamente enérgica, «Heroin Honey» en cambio nos muestra su otra cara, aquella donde priman las melodías y los ecos psicodélicos más sutiles. El paso dado con respecto a su anterior «Trash Glamour» (2014) es enorme, si en aquellos años se mostraban como una inocente y casi amateur banda de garaje, su realidad ahora es otra muy diferente pudiendo afirmar que podemos estar ante algo realmente interesante. Les seguiremos la pista muy de cerca.
ANDRÉS MARTÍNEZ
