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Gold – Stephen Gaghan (Tripictures)

En los últimos tiempos, Hollywood ha vuelto la vista a esos tiburones del mundo empresarial que partieron de la nada para llegar a lo más alto empleando métodos ‘turbios’ para, después, caer… y algunos volver a renacer incluso. Gold incide en esa temática, aunque tiene que vencer el obstáculo que representa en la memoria reciente cintas como El lobo de Wall Street o La gran estafa americana. No debería: detrás está Stephen Gaghan, director hasta ahora de la muy recomendable Syriana (2005) y guionista de Traffic. Además, cuenta con una de esas interpretaciones singulares a las que últimamente está abonado Matthew McConaughey (como Mud, True Detective o Dallas Buyers Club), con la intención de sacudirse su imagen de símbolo sexual. Él es el verdadero portento de este film, casi irreconocible físicamente en ese papel de emprendedor contra viento y marea, armado de coraje y resistencia, que decide invertirlo todo en su sueño de extraer oro de la jungla de Indonesia. Con una historia de amistad y lealtad y los desafíos de las multinacionales detrás, lo cierto es que a su director le interesa más enfrentar a su criatura a todas las situaciones límites por las que este puede pasar. Con estos antecedentes, nos gustaría que Gaghan no se tome otros 12 años para su próxima película.

 

XAVIER VALIÑO

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