Aunque los discos en lso que se remezcla las voces de artistas clásicos con interpretaciones de orquestas sinfónicas deberían estar prohibidos, son muchos los artistas que han sufrido esa idea.
Elvis Presley o Johnny Cash, han sido algunos grandes a los que hemos tenido que ver sometidos a esa «experiencia» y ahora, el 3 de noviembre Roy Orbison se une a ese club de dudoso gusto con A Love So Beautiful: Roy Orbison With The Royal Philharmonic Orchestra. Que sea noticia no significa que nos guste.
EI