En el Greenwich Village, durante la década de los sesenta, bruce Langhorne era uno de esos músicos que todo el mundo quería tener cerca. Y eso que con siete años había perdido dos dedos de la mano derecha. Pero superó esa adversidad para, con una técnica particular, convertirse en uno de los mejores guitarristas de folk de la historia. Por si haber grabado con gente como Richie Havens, The Clancy Brothers o Buffy Sainte-Marie no fuera suficiente, Bruce inspiró a Bob Dylan (con quien participó en numerosas sesiones de grabación) su famoso «Mr. Tambourine Man», ya que solía tocar una especie de pandereta en sus grabaciones.
Bruce Langhorne, básico para entender la transición entre el folk y el rock, fallecía el pasado viernes en su casa de Venice (California) a los 78 años de edad. El motivo parece ser una insuficiencia renal. Para despedirlo, qué mejor que las palabras de Bob Dylan en su Crónicas, Volumen 1: “tener a Bruce tocando contigo es todo lo que necesitas para poder hacer cualquier cosa”. RIP.
EI