Normalmente, las crónicas de conciertos suelen ajustarse a un patrón en el que se prima la importancia del setlist del evento: con qué canción empezó a tocar el grupo en cuestión, con cuál siguieron, con cuál terminaron. Sin embargo, en el engalanado Ocho y Medio Club por motivo de su 15 Aniversario (y qué pedazo de programación se han marcado en este mes de noviembre para celebrarlo), mención aparte merece el magnífico pogo que rodeó a la actuación de The Parrots y Novedades Carminha. Un pogo que más parecía una masa uniforme que, desde las alturas, se veía como una marea humana en la que The Parrots no tardaron en “darse un baño”.
Y es que a menudos dos les dió por juntarse sobre el escenario. The Parrots, con su acervo garagero lo-fi y su inconfundible falta de “puto respeto” (que diría Tarantino). Los loros madrileños se encargaron de calentar aún más a un público que ya venía calentito de casa (o de donde fuera) sacando a relucir su ya flamante último EP, “Weed for the Parrots” (Burger Records, 2015). Cuando llegaron a la altura de “To the People Who Showed Me Their Love While I Was Here” el público ya se había dado un par de contundentes contra el suelo en su afán por el “más todavía”. Y Novedades Carminha, con ese gamberrismo punk que les caracteriza. Un gamberrismo que les llevó incluso a invitar al Coletas a marcarse un rap durante el tema “Quiero ser Alaska” sobre el escenario del Ocho y Medio.
Banalidad hedonista, sudor y melodías pegadizas y pretendidamente insustanciales para celebrar a ritmo de pogo que no todo tiene sentido en esta vida. “Tú antes molabas”, “Te vas con cualquiera”, “Caprichito de Santiago”. Es imposible dilucidar en la trayectoria de los gallegos cuál de sus temas es más susceptible de provocar un “pogazo”, y así estos se iban sucediendo uno tras otro hasta llegar a la traca final, no antes de que los gallegos nos dejaran claro que están “hasta los cojones del euro” y los gritos de “otra, otra” invadieran la sala: “Jódete y baila” junto a The Parrots, con Álex “moviendo el cucu” ante las primeras filas, deseosas de extasiarse con su roce.
Una noche dedicada al puro desenfreno juvenil, en la que el público compartió protagonismo con unos The Parrots y Novedades Carminha en estado de gracia, decididos a hacernos sudar mucho a todos.
Texto y foto: Elena Rosillo
