Encuentros

The Lovely Eggs, deconstruyendo la esencia del Rock

TLEggs1BAJA

El dúo de garaje-punk The Lovely Eggs, integrado por la pareja originaria de Lancaster formada por David Blackwell y Holly Ross es un grupo de cimientos clásicos. Su trabajo se fundamenta en un conocimiento enciclopédico de diversos géneros de rock, desde la psicodelia y el garaje de los 60, el art-rock de la Velvet Underground, el hardcore de los 80 hasta los sonidos grunge más alternativos de los 90, distorsionados por su sentido surrealista de la realidad anclado en la cultura popular de Lancashire.

La música de los Lovely Eggs puede recordarnos por momentos a sus influencias, a la suma de sus partes, pero tampoco es un “sonido original” el elemento estilístico definitorio de la banda. Cualquier posible arrebato “retro” es más que compensado por dos cualidades que elevan al grupo por encima del pelotón de las bandas de garaje que, aunque infrecuentes en el Reino Unido, sí existen en cantidad y diversos grados de calidad en América y la Europa continental. La primera de estas cualidades es el original y siempre surrealista “Mondo Lovely Eggs” que introducen y describen en sus canciones. Este mundo, con plena consistencia interna, nace de sus vivencias como músicos alejados de los polos de atracción y de actividad en producción y promoción musical. Sus canciones reflejan un culto de lo cotidiano, de lo simple y falto de artificio que los encuadra en unos parámetros plenamente compatibles con esos estilos clásicos de los que demuestran ser seguidores.

Su segunda cualidad es la autenticidad de su actitud punk, en la medida en la que algo pueda ser auténtico en este mundo post-moderno. Fieles defensores de la ética “we jam econo” de los Minutemen y todo aquel movimiento “hardcore” americano de los 80, consideran las actuaciones en directo un fin más que un medio. La “gira que nunca termina” es su razón de ser y la propia motivación para la existencia de la banda. No hay futuro, solamente presente. Holly y David gestionan sus finanzas directamente, contratan sus conciertos, publican discos e incluso editan buena parte de sus videoclips. Viajando ligeros de equipaje en formato de dúo han recorrido ya prácticamente todo el Reino Unido y parte de Europa. En cierto modo se ríen de las crisis, ya sea esta la crisis económica en general, la crisis de la industria musical o la crisis de creatividad que acecha al sesentón mundo del rock and roll. Su actitud es el “qué importa lo que te digan, si tú quieres puedes hacerlo”, la esencia misma de lo punk.

Estas dos cualidades se perfilan en su manifiesto como banda, escrito con rotulador sobre una página de libreta e incluído como una simple fotografía en su pagina web. El manifiesto es sencillo pero es la introducción ideal al muy particular mundo de la banda. ‘Hacemos lo que queremos. Que es lo que pasa cuando tienes tu propio grupo” son las dos primeras frases, que por obvias no dejan de ser claves y a la vez preciosas en el mundo de la música actual. Por ejemplo, en el Reino Unido, decenas de bandas luchan día a día por la atención de un público menguante a base de seguir modas fútiles, de subirse a los vagones de cola de vanguardias con fecha de caducidad y en general de pretender ser lo que no son. En pleno siglo XXI uno no puede ser tan ingenuo como para alegar que la transformación que ofrece el artista en el escenario no sea precisamente uno de los alicientes del “show business”, pero lo que sí podemos decir es que su renuncia consciente a formar parte de cierta vorágine extra-musical sitúa a los Lovely Eggs en un espacio poco transitado y potencialmente fértil.

lovelyeggs

Los Lovely Eggs se definen tanto por sus afirmaciones como por sus negaciones. Por un lado, como nos dicen en su entrevista, afirman el rock and roll como una forma de vida, la carretera como su medio y el escenario como su vehículo de expresión. En contraste con muchos otros grupos contemporáneos que cultivan un amateurismo afectado y que rechazan la profesionalización, en la superficie quizás por cuestiones éticas pero en el fondo también porque todos tienen otros medios de vida o carreras a las que volver si este pasatiempo del rock no funciona, The Lovely Eggs decidieron hace tiempo apostarlo todo al negro. Por otro lado niegan la necesidad del virtuosismo y la complicación técnica, la sofisticación en las grabaciones y arreglos, las actitudes afectadas e incluso la música como una forma “artística”. Además de obviar la necesidad de una industria musical tal como la hemos conocido hasta ayer mismo. Porque otro elemento muy importante en los Lovely Eggs es la idea del DIY, o del famoso “do it yourself”, que afirma una estética y actitud ante la industria musical que facilita una libertad al artista escasa en otras bandas más dependientes de adelantos, contratos 360 y otros tipos de “hipotecas”. En este caso esta ética es a partes iguales una opción, tomada como ya hemos dicho de otros movimientos de los 80 y 90, y una obligación llevada por la falta de una industria discográfica y circuitos profesionales de música en directo en Lancaster.

El planteamiento de los Lovely Eggs comienza de unas premisas sencillas. Hacer música sin demasiadas limitaciones, libertad para organizar tours con poca antelación y sobre todo devolver la “diversión” al concierto de rock, tanto para los músicos como para la audiencia. De ahí que el formato de dúo fuese la elección natural para la pareja de Lancaster. Lo mínimo necesario.

Hablamos con Holly y David mientras ultiman los preparativos de su concierto en el Lexington de Londres, entre ajustes de baterías y siempre con un ojo puesto en Arlo, su hijo todavía pequeño que los acompaña en la gira y que corretea por el escenario.

¿Cómo definiríais la música de los Lovely Eggs?

Holly: Cuando empezamos con el grupo no queríamos tener reglas, de modo que fuese posible tanto hacer una canción punk ruidosa como un “wig out” psicodélico de cuatro minutos. Cosas muy diferentes.

David: Sí, supongo que no nos definimos tanto por un estilo musical como por una idea.

Pero al final cómo creéis que vuestros discos han acabado sonando.

Holly: Bueno, hay guitarras ruidosas, guitarras potentes es lo que nos gusta. Y sencillez.

David: Empezando por nosotros mismos, claro. Porque solo somos dos.

Descripciones que uno oye o lee de cuando en cuando son garaje-pop o garaje-punk.

Holly: Bueno, la gente nos ha llamado un montón de cosas diferentes. No sé. Seguimos una ética punk-rock, de eso no hay duda. Pero no creo que sonemos al punk tradicional de 1977 para nada. Pero es definitivamente punk.

¿Y qué artistas os han influido en particular? Uno podría querer oír ecos de The Who, Syd Barrett, Velvet Underground, o incluso bandas de los 90 como The Breeders

Holly: Sí, claro!

David: Todo tipo de música, de verdad. Todos esos grupos que mencionas y muchos muchos otros. Tenemos un gusto musical bastante diverso. Un montón de cosas de los 60 también.

Holly: Nos gusta Syd Barrett y ese tipo de material surrealista. Pero no solo en música sino también en otros aspectos. Nos gustan elementos surrealistas que te hacen pensar, ya sea musicalmente o de cualquier otra manera

¿Qué grupos os gustan de vuestra escena local?

Holly: Bueno, Hotpants Romance, obviamente (risas) [Nota: Miembros de Hotpants Romance acompañan a los Lovely Eggs en esta gira, ayudando como “babysitters” entre otras cosas] Es uno de nuestros grupos favoritos. Son de Manchester. En Lancaster hay muchos grupos pero ninguno con el que nos identifiquemos mucho.

David: La verdad es que no tocamos mucho en nuestra ciudad. Siempre nos vamos de gira fuera. No hay nada en particular que nos guste.

Aunque los temas tratados en vuestras letras son totalmente británicos detecto muchas afinidades con America en vuestra música.

Holly: Definitivamente el sonido.

David: Estamos influenciados por un montón de música americana, directamente desde los 60 pero también mucho de la escena de los 90.

Holly: Somos fans de bandas como Sonic Youth, Mudhoney o Nirvana, sus sonidos de guitarra principalmente. La música con guitarras fuertes es lo que más nos va.

David: Pero no queremos sonar americanos, a pesar que la música americana sea una influencia importante.

Holly: La música americana es una influencia fundamental para nosotros. Todos mis grupos favoritos, la mayor parte, son americanos, pero no queremos sonar como un grupo americano. Cantamos usando nuestro propio acento de Lancaster. Y cantamos sobre cosas británicas, porque es nuestra propia vision del mundo.

Hay una ética quizás diferente también ¿no? Grupos del sur de Inglaterra tienden a sonar un poco más … ¿cómo decirlo?

Holly: Afectados?

Justo, ¡exactamente eso!

Holly: Sí, nosotros definitivamente no somos así. Nos identificamos más con la ética de la escena hardcore americana. Viajar, pasarlo bien, ir a fiestas, disfrutar con la música en general. Sacar un disco, conocer a gente y joder a la industria musical!

También detecto una tendencia hacia la cultura “lowbrow” o lo que alguna gente podría describir como “trash culture” en vuestra música, videos e incluso las portadas de los discos. También es algo muy americano, quizás ¿Lo hacéis de una manera consciente?

Holly: No creo que sea consciente. Es simplemente nuestro mundo. No escribimos sobre cosas que no sean parte de nuestras experiencias, así que los videos y las portadas reflejan ese aspecto. Bueno, quizás algunos videos que hemos hecho con Casey no son “nuestro mundo” exactamente, pero salen de él.

David: En ese caso trabajamos con visiones externas también.

Holly: Nada de lo que hacemos es forzado o pensado como “éste es el estilo que queremos hacer”. Es un reflejo de lo que somos, si es que esta idea tiene algún sentido.

¿Cuál es vuestra manera de componer? ¿Primero la música, las letras?

Holly: Bueno, no hay una sola manera.

David: Es distinto cada vez. A veces Holly viene con una melodía y una parte para la voz, incluso antes de que empecemos a tocar. Pero otras veces es en el ensayo cuando las cosas salen y las escribimos allí mismo. A veces las canciones vienen completas y otras vez es la melodía y voz primero.

Holly: Creo que normalmente es la letra primero y la melodía después.

David: O viene todo junto la vez o seria letras y melodía primero y luego les ponemos la música.

TLEggs5BAJO

¿Es el sentido del humor importante para vuestra música? ¿Es algo consciente?

David: Ya entiendo lo que quieres decir pero no, no es algo consciente

Holly: Pero yo creo que no puedes tomarte la vida demasiado en serio. Algunos grupos se toman demasiado en serio y todo que lo que nosotros queremos desde que empezamos es pasarlo bien, conocer gente, beber todo lo que queramos, viajar por el mundo y estar en tantas fiestas con tanta gente como sea posible. Combinar nuestros espíritus de manera que podamos tener una fiesta en comunión con la audiencia.

Entrevisté hace poco a Richard Dawson, no se si lo conocéis

David y Holly: Ah sí, claro!!

… y mientras que sus canciones son hasta cierto punto oscuras también hace uso ocasional del sentido del humor para evitar ser demasiado sombrío y lanzar su mensaje de una manera más efectiva.

Holly: Si claro, nosotros tampoco intentamos ser “divertidos”.

Otra pregunta que también le hice a Richard es si creía que el venir del norte de Inglaterra o de Newcastle en particular tenia algún efecto en su música.

Holly: Ah sí, definitivamente. Nosotros siempre quisimos hacer música a pesar de … Bueno en Lancaster no hay realmente una escena musical importante y nunca estuvimos conectados con nadie de la industria musical en absoluto. Así que nos sentimos bastante aislados y simplemente pensamos que “a la mierda”, de cualquier manera vamos a tener un grupo e ir de gira. Así que de algún modo aumenta nuestra determinación de hacer música de nuestra manera, porque no hay ninguna escena preestablecida, no hay nadie que nos ayude, no hay nada. Y la verdad es que nos gusta de esta manera porque si vas a Londres puedes ir a ver un concierto cada noche y puedes terminar influenciado por los otros grupos al escuchar lo que suena en la escena alrededor de ti. Y también puedes acabar siguiendo a otros grupos y antes de que te des cuenta acabas sonando como ellos. Pero en Lancaster no salimos demasiado a conciertos así que quizás eso nos ha ayudado a conseguir un sonido más original.

Holly: Por eso nuestro nuevo álbum se llama “This is our nowhere” y va sobre la vida en Lancaster, que todo el mundo ve como el fin del mundo comparado con Londres, que es donde se mueve la escena y las bandas más importantes. Pero es sobre todo una celebración. Y supongo que al fin y al cabo en el punk rock o hardcore existe ese ideal de que “cualquiera puede hacerlo”.

Siempre mencionáis a Richard Brautigan, el novelista americano. ¿De qué modo ha sido una influencia?

Holly: Es un autor surrealista de los 60, que no es realmente parte del “beat generation”. Tiene su propio estilo. Un novelista increíble con una vision del mundo totalmente original, cuando lees uno de sus libros te das cuenta. Termino suicidándose, creo que en los años 80.

¿Crees que vuestras historias tienen alguna influencia de sus novelas?

Holly: Bueno, creo que sí. Su manera de describir las cosas. Quizás intento incluir de algún modo cosas en su estilo.

Sobre el minimalismo y como decidisteis ser un dúo

Holly: Fue fácil! Realmente queríamos viajar, beber, pasarlo bien y hacer música. Esas cuatro cosas. Y es muy difícil organizar a cuatro personas para salir juntos. Así que montamos el grupo justo el año anterior a casarnos y pensamos que esto sería genial porque así podríamos salir a tocar cuando quisiésemos. Solamente tengo que preguntarle a David, o él a mí y si a los dos nos apetece salimos sin tener que convencer a más gente. Los dos hemos estado en grupos antes con más gente y el realmente difícil organizar a cuatro personas solamente para salir de gira y para nosotros el viajar y pasarlo bien es muy importante.

Y quizás es más fácil de montar un dúo. Necesita menos ensayo.

Holly: ¡No que va! ¡Eramos realmente malos! Una auténtica mierda. David no sabía tocar la batería cuando empezamos con el grupo. En absoluto. Era guitarrista pero tuvo que aprender porque como yo canto no era tan fácil para mi tocar la batería.

David: No queríamos usar una caja de ritmos.

Holly: Es más fácil tocar la guitarra y cantar que tocar la bateria y cantar, así que ….

No querías hacer ese rollo al estilo Karen Carpenter

Holly: Así que David tuvo que aprender a tocar la batería.

Existía esta escena en los años 80, de grupos tocando garaje rock sin bajo como Pussy Galore o The Gories, o incluso dúos más recientes como White Stripes o The Black Keys.

Holly: La verdad es que nunca pensamos en ello. No creo que nos influenciasen para nada ninguno de esos dúos. No es que viésemos a los White Stripes y pensásemos “ah, nosotros podemos hacer lo mismo”. Fue simplemente la salida más fácil. Estábamos saliendo juntos, obviamente nos gustaba pasar tiempo el uno con el otro.

David: La idea principal fue montar algo con lo que pudiésemos viajar y girar, como dijo Holly antes. Si tienes más gente necesitas llegar a un arreglo con otros que no son parte de la “unidad básica”, así que de esta manera no teníamos que convencer a nadie. Para ser sincero esta es la única manera en la que vimos que esto pudiese funcionar.

Holly: Tocamos por primera vez en Nueva York y luego en un montón de sitios en America y fue genial. Ha sido genial desde entonces porque es tan fácil. Pero luego tuvimos un niño y ahora ha vuelto a ser más complicado otra vez, es como salir con un grupo de seis (risas). Todo es más duro pero aun así…

Supongo que es hasta cierto punto positivo ver que dúos como los White Stripes o los Black Keys estén teniendo un éxito masivo en este formato y tocando para audiencias grandes. Hasta hace no tanto no había precedentes ni se pensaba que fuese posible.

Holly: Bueno si, es cierto probablemente. Es ciertamente un fenómeno de ahora, esta cosa de los dúos. Cuando empezados no había muchos pero ahora mismo hay muchos más. Supongo que un montón de gente lo hace por cuestiones de economía, porque es mucho más barato salir de gira así.

La cuestión económica. Realmente abrazáis el DIY y el “háztelo tu mismo” ¿hay también una cuestión financiera detrás de esta decision

Holly: En un sentido sí. Sacamos más de los discos publicándolos nosotros mismos que si tuviésemos una discográfica. Pero también es más difícil, porque tenemos que hacer absolutamente todo nosotros mismos. Diseñar la portada, enviar el disco a la imprenta y a la prensa, es literalmente todo. No creo que fuese una decision consciente el hacerlo así pero al final las cosas sucedieron de esta manera.

Bueno, si en Lancaster no hay mucha industria musical..

Holly: Sí, y también tenemos esa ética “hardcore” de salir adelante a pesar de las circunstancias. Si nadie va a llamar a nuestra puerta para publicar el disco, pues lo hacemos nosotros mismos. Es esa mentalidad de decir “a la mierda” y simplemente poner manos a la obra. Tampoco nos paramos mucho a pensar en qué hacemos o por qué lo hacemos, simplemente lo hacemos y ya está.

¿Tenéis alguna opinion en esta discusión reciente entre el músico James Blunt y el politico laborista Chris Bryant sobre la clase social en los mundos de la música y el arte en general? Cómo están cada vez más acaparados por las privilegiadas clases medias, que son las únicas que pueden permitirse “perder dinero” en las siempre duras etapas iniciales.

Holly: Nuestro amigo Marty escribió un articulo sobre eso.. Tristemente yo creo que mucho de ello es…

David: Si tienes más tiempo para hacerlo y no tienes que preocuparte de buscar dinero entonces tienes más tiempo para..

Holly: Si tu padre y tu madre tienen dinero y pueden mantenerte de modo que no tengas que buscarte un trabajo y puedes ir tocando y girar a donde quieras entonces vas a poder llegar mucho más lejos que si no puedan darte ningún dinero y vas a tener que quedarte con un trabajo. Me acuerdo de tener que hacer esto en mi antiguo grupo cuando queríamos ir de gira pero la gente decía “yo no puedo porque tengo que trabajar”. ¿Cómo voy a pagar el alquiler y todo eso? Hay consideraciones financieras.

Supongo que por eso es importante que el proyecto musical sea también solido desde el punto de vista económico. Que la gente pueda mantenerse con lo que hace.

Holly: Muchos grupos, y esto no es una queja sino una observación, si miras la historia de un montón grupos que han llegado lejos ves que sus padres conocen gente o incluso trabajan en discográficas o son amigos de alguien que está conectado. Casi nunca encuentras familias complemente ordinarias en este mundo.

Bueno, yo soy un gran fan de Sonic Youth, pero acabo de leer las memorias de Kim Gordon (“Girl in a Band”) y no pude evitar asombrarme por lo bien conectada que estuvo toda su vida. La gente que conocía.

Holly: ¡Totalmente! Uno podría pensar vaya, pues no me sorprende. Supongo. Creo que esto pasa un montón pero en el fondo es hablar por hablar porque no tengo pruebas de que ocurra. Son solamente especulaciones.

David: Al final solo podemos hablar de lo que hemos hecho o de lo que realmente sabemos.

Holly: Y vemos, ah mira, estos están en el programa de Jools Holland o en otra cosa y podrías querer investigar un poco y darte cuenta de que el padre del cantante se esta beneficiando a esta persona o a otra. Y eso es el por qué.

Supongo que lo máximo son The Strokes, que se conocieron en un internado suizo extra-exclusivo.

Holly: De verdad? No lo sabia pero no me sorprende.

Holly: De todos modos lo importante es seguir nadando contracorriente, que los grupos sigan trabajando porque alguna gente va a salir adelante a pesar de todo. Aunque puede que no quieran porque yo creo que este es un mal negocio (risas).

¿Cómo veis vuestra carrera desarrollándose en los próximos anos?

Holly: Bueno, la bola de cristal esta bastante nublada. No sabemos lo que vamos a hacer de una cosa para la siguiente. Cuando empezamos el grupo no creíamos que fuésemos a conseguir hacer esto como un medio de vida pero ahora estamos ahí. No sabemos qué estaremos haciendo dentro de un año. Ni idea. Probablemente seremos…. ¡contables! (risas) Aunque seríamos muy malos porque soy un desastre con las matemáticas así que no creo que nunca llegue a ser un buen contable.

Siempre puedes ser un “contable creativo” como esos que parece que tienen muchas grandes corporaciones hoy en día en plantilla.

Holly: Bueno, yo puedo ser “creativa” con los números.

Particularmente considerando vuestro lado DIY ¿cómo creéis que Internet ha cambiado la manera en que funciona la industria y cómo habéis reaccionado ante ello?

David: Es totalmente diferente pero supongo que simplemente tienes que ir con la corriente. ¿Qué piensas tú Holly?

Holly: A veces echo de menos cuando no teníamos internet y simplemente pegabas carteles alrededor de la ciudad y ése era el único medio de anunciarse, en lugar de estar mirando el teléfono móvil todo el día.

David: No me puedo imaginar como lo hacíamos antes, de verdad. Es raro mirar hacia atrás. Es tan fácil contactar con la gente ahora. Antes tenías que llamar por teléfono.

Holly: Yo creo que en el pasado habríamos necesitado un contrato discográfico para hacer todo lo que hacemos ahora, porque muchas puertas estaban cerradas.

David: Bueno, todavía podías trabajarlo a nivel DIY ¿no?

Holly: Bueno podías, pero era mucho más difícil, tenías que escribir a los locales directamente.

David: Había agentes.

Holly: Es cierto, la verdad es que no sé.

Muchos grupos no están demasiado contentos con Spotify. Te ofrece una manera fácil de publicar tu música pero a cambio la retribución es realmente mínima

Holly: Sí, solo hay una persona que hace dinero con Spotify y es probablemente Spotify. No creo que haga ningún favor a los artistas. Es bueno para los consumidores de música, pero los hombres de negocios se llevan probablemente todo el dinero. No sé.

David: Pero nunca hemos estado en una posición de ver la otra cara, realmente. Las compañías discográficas se basaban en la venta de discos pero Internet ya estaba ahí cuando empezamos con este grupo. Y antes Holly estaba en un grupo que sí tenía contrato discográfico pero nunca sacó ningún dinero de ahi, así que … Esto es todo lo que conocemos.

Pero todavía hacéis un esfuerzo para publicar LPs en vinilo, CDs

David: Sí, es importante tener cosas que se puedan tocar.

Holly: Vivir en el mundo real.

David: Porque es difícil, hacer el diseño, que lo hacemos nosotros mismos, para tener algo real. Todavía compramos CDs y vinilos, no nos fiamos solamente de los iPods, aunque también los usamos porque a veces son prácticos. Pero nos gusta publicar discos.

Vuestros videos son siempre interesantes y únicos, otra dimension que es realmente “Lovely Eggs”. ¿Cómo trabajáis en ellos, es algo planificado, usáis un guión o simplemente improvisáis sobre la marcha?

David: Son simplemente “nosotros”. Necesitamos tener videos así que simplemente nos ponemos a trabajar y lo hacemos. Supongo que es lo que hace todo el mundo, es un reflejo de lo que somos.

Holly: Casey Raymond dirigió los últimos cuatro videos que hicimos y los filmó y los editó también él, así que ha tenido una contribución creativa importante. Los primeros como “Don’t look at me”, “Have you ever heard a digital accordion” o “I like birds” los hicimos simplemente nosotros.

David: Holly los editó conmigo.. Pero sí, era demasiado para hacerlo todo nosotros. Cuando conocimos a Casey nos encantó lo que hacía y él realmente quería hacer nuestros videos. Era un fan de los otros que habíamos hecho también pero por supuesto en los suyos hay una aproximación diferente.

Son todavía bastante surrealistas

David: El sabe más o menos lo que nos gusta y lo que queremos y quiere colaborar con nosotros… Es su interpretación de “nosotros”, supongo, pero todavía siendo nosotros.

[David sigue con la prueba de sonido y continuamos solo con Holly]

Sobre la colaboración que habéis hecho con Jad Fair ¿Sois fans de Half Japanese? Cómo surgió esta colaboración?

Holly: Absolutamente, fans enormes. Nos encanta su manera de hacer música y es una inspiración total para nosotros. Como él, puede que no seamos grandes músicos, pero todavía queremos intentarlo y ver qué es lo que sale.

Por supuesto uno podría decir que Jad Fair es un gran músico simplemente porque hace buena música.

Holly: Ah sí por supuesto, yo me refiero a que no es técnicamente un gran músico, no toca su instrumento tan bien. Para mi ninguno de los mejores músicos son realmente virtuosos en sus instrumentos. Ninguno de los que me gustan. No me gusta la gente que toca muy bien.

Otra colaboración quizás menos obvia es el remix que Tjinder Singh de Cornershop hizo de “Food

Holly: Un día estaba escuchando una canción de Cornershop en la radio y pensé que era absolutamente genial. Decidí escribir un email al grupo diciéndoselo, solamente una línea para comentarles lo increíble que es. Mucha gente a la que le gusta tu música nunca te dice nada y yo sé lo agradable que es que te den “feedback” positivo. Así que les escribí y Tjinder contestó dándome las gracias. Un par de meses más tarde volvió a escribir diciendo que le gustaría remezclar una de nuestras canciones, si no había problema. Y por nosotros estupendo, si el quería hacerlo…

Suena bastante diferente a la original, incluso con un bajo estilo Sting en algunas partes.

Holly: Suena como autentico punk de los 70, punk británico de 1977.

¿Son importantes los 60 para vosotros?

Holly: Bueno, nos gusta un montón de música de los 60. Y supongo que también nos gusta mucho la moda de los años 60. Estamos en ese rollo y seguro que hasta cierto punto eso también se refleja en la música.

Pero nunca os habéis visto como parte de la escena mod.

Holly: No, no somos mods totales ni nada parecido pero me gusta la onda. Siempre me ha atraído. Pero no me consideraría a mi misma una mod. Nos gustan los 60. Nos gustan los 60 psicodélicos pero también la parte mod. Es parecido a la manera en que nos gusta el punk, de verdad nos gusta pero también nos va lo hippy. Es realmente la mezcla entre lo hippy psicodélico y el punk más crudo y salvaje. Son como agua y aceite, no se mezclan, pero es como somos. A veces escribimos melodías que recuerdan a los 60 pero luego tenemos la agresión y la energía de esas guitarras enormes con fuzz.

Uno podría decir de grupos como The Who que eran realmente pre-punk. Y por supuesto The Sonics más adelante.

Holly: ¡Totalmente! Pienso lo mismo.

¿Estáis muy interesados en guitarras y equipamiento “vintage”?

Holly: Sí, uso un amplificador Selmer “vintage” y me conecto a la entrada de bajo para obtener un sonido más profundo. Pero en realidad yo no estoy tan interesada en el equipo, ése es más bien David. El es un gran fan y le vuelven loco los amplificadores antiguos de válvulas. Colecciona guitarras y tiene montones y montones de guitarras, baterías y equipo diverso. Porque como trabaja en un estudio de grabación en Lancaster está muy metido en ello. Pero bueno, como somos solo dos, si vamos a tocar una guitarra, pues usemos una buena de verdad. No es que sea cara o nada por el estilo… o bueno quizás lo sería hoy si uno la quisiera comprar en eBay, pero es simplemente porquería que David ha ido recogiendo a base de años de recorrer mercadillos.

Esa Fender Jaguar que tocas

Holly: Esa guitarra es de David. Yo solamente la tomo prestada y la maltrato (risas), la rayo, la abollo y luego se la devuelvo. Pero es una guitarra estupenda, me encanta tocarla.

Y para terminar ¿habéis tocado alguna vez en España?

Noooo. Nos encantaría hacerlo pero nunca ha surgido. Hemos tocado en Europa, en Francia, Alemania, Austria, Suiza, América, pero nunca en España.

Este estilo de música seguro que seria popular. Veamos si pronto hay alguna oportunidad para que las audiencias españolas se introduzcan en el curioso y muy surrealista mundo de los Lovely Eggs.

Texto: David Varela Santoalla

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Contacto: jorge@ruta66.es
Suscripciones: suscripciones@ruta66.es
Consulta el apartado tienda

Síguenos en Twitter