Encontrarse con Jaime Anglada siempre es un placer. No solo por la mistad que nos une, sino porque sus conciertos son una garantía de entrega y de buenas canciones. La cita el viernes pasado en El Medi (antes Mediterráneo) no fue una excepción. El mallorquín demostró que sigue confiando (y bien qué hace) en la fuerza de sus temas y su capacidad para transmitir pasión con cada una de sus palabras, y en todos sus acordes. Así que mientras muchos disfrutaban de Suede en el Cruïlla, los que nos acercamos a la acogedora sala del centro de l’Eixample barcelonés disfrutamos de una fantástica velada entre éxitos como «Nunca Tendremos Graceland» y «Otra Canción de Carretera», con un nuevo arreglo que le sienta fenomenal, canciones que se estrenaban, algunas incluso con apenas una semana de existencia, y versiones entre las que desfilaron El Último de la Fila y su «Insurrección», Serrat con «Aquellas Pequeñas Cosas» y un sorprendente «Resistiré» de El Dúo Dinámico (no, no me he vuelto loco y Jaime tampoco) que Anglada reivindica tomándolo de su infancia para convertirlo en un rock de puño al aire muy acorde con los tiempos que corren. La guinda con el músico cantando a dúo con Ed Harley el «Thunder Road» de Springsteen y la traca final con «Mi Camarera» cerraron una noche perfecta. Ya le estamos esperando otra vez.
Texto: Eduardo Izquierdo
Foto: Raquel Sánchez