Quienes devolvieron las entradas o se fueron a media proyección de El Árbol De La Vida, que se olviden desde ya de esta película.
Por mucho que el protagonista sea Ben Affleck, él siempre es un reclamo y más después de su triunfo como director de Argo. La nueva cinta de Terence Malick To The Wonder es como si fuese una continuación de aquella, con otro ambiente y otra temática, pero el enfoque, la luz, los silencios, la perspectiva, todo en ambas es parecido. Aquí es el amor, y el concepto de la pareja. En Él Árbol De La Vida era la vida, contemplada desde una visión muy new age, sin embargo la película era dura a ratos, porque la perdida y la desolación marcaban la pauta, el ritmo. Aquella era infinitamente mejor, profundizaba más y mejor, y si bien creo que las críticas a To The Wonder no están bien medidas, si da la sensación de que esta vez ha forzado la maquina, acostumbrado a entregar una nueva película cada siete u ocho años, y en esta ocasión no han pasado ni dos, quizás le faltaba madurar mejor la idea, atinar con el guión y no fiarlo todo a las imágenes contemplativas de su predecesora. Eso sí, para el recuerdo quedan dos frases que dan para una profunda reflexión: “no espero nada, solo compartir un trozo de nuestros caminos”, “creías que tenías toda la vida para decidirte, pero ese tiempo no existe”. Puro Malick. En lo bueno y en lo malo.
Toni Castarnado
