Encuentros

Rubén Pozo, lo que más

Así se llama su disco, su debut en solitario. Con la banda y la guitarra listas para pasear su repertorio en solitario (4 mayo Bikini, Barcelona; 5 mayo Kafe Antzokia, Bilbao; 10 mayo Sala Custom, Sevilla; 11 mayo Sala Imagina, Cádiz, 12 mayo Sala El Tren, Granada ), contactamos con él para que nos explique qué ofrece de nuevo y para recordar viejos tiempos rocanroleros. Acostumbrado a que disparen en su contra, alternar críticas y grandes llenos en sus conciertos  (y a vender discos en cantidades industriales), Rubén tiene claro qué quiere y como conseguirlo…

 

 

-Se ha hablado mucho de la separación (temporal) de Pereza, y del proceso del que surgieron vuestros dos discos en solitario. Sinceramente, en el tuyo encuentro bastantes menos rasgos de la banda de lo que esperaba, con un enfoque menos pop y más cercano a los sonidos facturados desde ese mundo que tiene su capital en Buenos Aires…

-No me lo planteo en plan «he hecho un disco de rock» o «he hecho un disco de pop» o si «sonido Pereza» o «me he aproximado al rock argentino»… He hecho lo que quería, como quería y con quien quería. Para mí son canciones, letras y melodías sobre música de guitarras.

-Es un hecho: Pereza ha sido acogido siempre con reparos en el sector más rockista de la afición. ¿Qué es necesario para derribar esa fama de comerciales y poperos que os persigue? O quizás os da igual, no lo sé…

– No sé, Alfred… la verdad es que voy a responder en pasado: al principio nos jodía y al final nos la sudaba. Cuando tienes éxito te buscan las cosquillas por cualquier lado.

-El disco va a tu nombre, pero se aprecia cierto sentimiento de comunidad, de banda compenetrada. ¿Puedes presentar a tus compinches?

-Estoy encantado con la banda. Hemos grabados las bases instrumentales (batería, bajo, guitarras) tocando todos juntos en una habitación. Batería: David Rico, guitarra: Joe Eceiza, bajo: Alvaro Lucini y en directo se ha sumado Miguel Preciados a los coros, teclas y guitarra.

-Seamos francos: se te ve el plumero, tío. Eres un sensible, lo demuestran tus letras. ¿Estás siempre enamorado o solo pretendes mantener la inspiración que otorga en enamoramiento brutal?

-La verdad es que las lides amorosas es lo que más me descolora por dentro. Me curo haciendo canciones. No estoy siempre enamorado o siempre odiando, eso es imposible. En cualquier caso, en Lo que Más toco el tema de las relaciones desde muchos puntos de vista: a flor de piel, frívolamente, sexualmente, románticamente, descreído, desengañado… Desde el cariño, Alfred, igual te falta una segunda vuelta al disco. Igual me equivoco… ya me dices.

-Los Kikes (Turrón y Babas) han hecho la hoja de promo del disco. ¿Necesitas sentirte rodeado de tu gente?¿Desconfías de lo que te rodea y desconoces?

-Mola sentirte rodeado de tu gente, no desconfío de los demás más que cualquiera. Si hubieras querido hacer tú, por ejemplo, la hoja de promo, lo tendría que haber sabido y por mí no habría habido ningún problema. Soy rutero y me encantan vuestras maneras.

-Ha llovido mucho desde los tiempos de Buenas Noches, Rose, banda injustamente olvidada. ¿Qué queda en el Rubén actual del chaval que se estrujaba las cuerdas de su guitarra en esos tiempos?

-Para mi queda todo, lo que tengo es el culo más pelao y más bagaje a mis espaldas, pero sigo estando loco. A tope…

-¿Y en el panorama musical actual? ¿No huele demasiado a una mezcla naftalina y plástico made in China?

-Puede ser, yo oigo demasiado ordenador en los discos, pero es mi humilde percepción.

-¿Donde está el revulsivo que iría de coña para agitar la escena?

-Yo creo que Lo que Más lo tiene todo para hacer eso que dices.

-Tu disco está repleto de potenciales singles. ¿De dónde surge la capacidad para lograr esas melodías pegadizas, esos riffs adhesivos?

-Joder, eso que dices me parece un piropo. Hay quien dice que mi disco mola porque es todo lo contrario a eso… Creo que tengo la capacidad de notar cuando algo es bueno. Y aun más suerte tengo de notar cuando algo es genial. A eso voy siempre.

-Ya has dado salida a parte del material que habías escrito. Y ahora ¿qué?

-Ahora viene el directo, que es lo que más me gusta del mundo mundial. Ahí las canciones están vivas, como todos los que están en la sala, arriba o abajo del escenario.

ALFRED CRESPO

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