Tras dos discos en los que la cantautora norteamericana sentó las bases de su música, y a pocas semanas vista de su paso por estos lares, Alela Diane nos habla de su nuevo disco, “Wild Divine”, y de otras muchas otras cosas que tratan sobre ella y su carrera musical.
Para empezar, me gustaría saber como fue el proceso de creación del disco.
Empezamos en Venice en el estado de California, con el productor Scott Litt. Estuvimos durante unas semanas preparando los temas principales, y entonces trasladamos el proyecto a mi hogar, a Nevada City. Y añadimos todos los flecos (harmonías, guitarras dobladas…). Todo se hizo relativamente rápido, pensado en que todo estaba rodado y que Scott Litt estaba seguro de que era lo que necesitaba.
¿Cuáles son las principales diferencias que aprecias con respecto a trabajos anteriores?
La principal diferencia radica en que ésta es la primera vez que uso a un productor. Los anteriores los produjo mi padre, Tom. Y el sonido de este álbum va definitivamente en otra dirección. No es tan `folky´ como “Pirate´s Gosple” o “To Be Still”. Es más pesado en cuanto al bajo, las guitarras eléctricas.
¿No crees que el principal cambio no radica tanto en las composiciones como en el sonido del disco?
Yo creo que lo podemos ver en ambos. Para este álbum, he focalizado más mis energías en las canciones en si mismas. Pase muchos días trabajando y retocándolas: cambiando palabras, melodías, y progresiones en los coros muchas veces hasta llegar a lo que puedes oír en el disco. Las composiciones han llevado al sonido a un nuevo camino.
Tu padre y tu marido han escrito 7 de los temas del disco. ¿De que modo crees que influye eso en tu música?
Eso influye en el sentimiento que hay en el disco. Cuando trabajo con ellos hay aspectos y otras ideas que yo haría por mi misma. Fue muy grande trabajar con ellos y tener la oportunidad de crear estas melodías. Y pienso que las canciones se benefician de tener toda esa serie de oídos pendientes del trabajo.
Creo que es interesante explorar y encontrar otros caminos, pero a veces la gente prefiere escuchar siempre lo mismo. ¿Qué opinas al respecto?
Me da la sensación de que la gente siempre tiene miedo a los cambios. Queremos hacer música que sea nueva en algún sentido, pero que sea un desafío dentro de lo que creemos que debe o puede ser. Es una lastima que una artista quiera renovarse e ir en otra dirección, y en cambio los fans no tengan esa misma intención.
Los títulos de tus discos siempre tienen un significado especial. ¿Qué me cuentas de “Wild Divine”?
Para mí, es una referencia a lo desconocido y a lo inexplicable. El disco trata mucho sobre preguntas sin respuesta, y sobre conceptos misteriosos, así que el título parecía idóneo para lo que es el proyecto.
Ahora vemos que hay muchas mujeres interesadas en la música folk, y la industria parece que también. Chicas como Laura Mailing, Caitlin Rose, Eileen Jewell o el retorno de Gillian Welch. ¿Por qué?
Es interesante para mi observar el gran número de mujeres que hay en la industria. Es bueno que esas mujeres llamen la atención del género y del negocio. Aunque creo que nosotras siempre deberíamos tener o haber tenido esa fuerza y esa presencia en la música.
¿Y que opinas sobre el papel de la mujer en la industria de la música en general? ¿Crees que ha cambiado en los últimos años?
Pienso que todavía es duro para nosotras. Yo haciendo esto desde hace siete años, y todavía me encuentro bajo un radar. Aún somos muchas las que protegemos la música que hacemos, luchando por una buena causa, pero raramente obtenemos el nivel de atención que es necesario para sostenerse. Tienes que llamar la atención por otras cosas, ya sea tu sex appeal, por ser una loca borracha, o bien una zorra. Si simplemente caes en la tentación de hacer buena música, será más difícil que la industria muestre interés por ti. Y en cambio, todo lo que tiene que hacer un hombre en el negocio, es fumar un cigarrillo, tener un aspecto guay, y vestir la misma camiseta sucia en el escenario cada noche. Para mi es frustrante que eso pase todavía, en los tiempos que vivimos. No soy un objeto sexual, ni una borracha, ni una zorra con el culo duro, y tampoco una chica inocente por más tiempo, solo me dedico a hacer música.
Y una curiosidad, ¿estás interesada en nuevos artistas? ¿O bien prefieres escuchar música más antigua?
Tengo básicamente discos viejos, muchos de música popular de los 70, pero hay una serie de artistas que he descubierto más tarde. Creo que Fleet Foxes le están dando algo muy bonito al mundo ahora mismo. También Beach House, Kurt Vile o Dyaln Leblanc.
¿Qué podemos esperar de tus conciertos en España?
Estaremos con la banda al completo, con Wild Divine, y haremos temas del disco nuevo, así como de los anteriores. Y vestiremos todos de negro.
