Rocksound, Barcelona
Había ganas de comprobar si lo de Stacie Collins era sólo uno de esos rumores que circulan de forma tan habitual por Internet o realmente había algo más. Los que ya la vimos en su primera incursión patria estábamos más cerca de lo segundo pero ¿realmente ahora era tan buena? La respuesta es no. Stacie Collins sigue siendo buenísima, como antes.
Esa sería la afirmación correcta. Su nuevo disco vuelve a ser un pelotazo de country-rock, o mejor dicho, rock-country vacilón y tremendamente adictivo. Igual que su directo. Con una banda perfectamente engrasada que suena como un todo unitario tanto en los temas propios de la Collins como en las versiones (por ahí pasaron desde Rufus Thomas hasta los Stones por partida doble ¡impagable «Happy»!). Todo eso enardeció al público en una sala prácticamente llena y que combinaba, allí también, la gente que se había quedado prendada de esta mujer con su primera visita con los noveles que se acercaban a ver tanto revuelo en las huestes rockeriles. El resultado dejó a todo el mundo encantadísimo. Que vuelva ya.
Raquel Sánchez
Foto: Luis Lecumberry