Un viaje en el tiempo es lo que nos propusieron Lagartija Nick en la sala Biribay de Logroño, y es que el grupo granadino sigue girando con su formación original recordando sus primeros años de vida, por lo que el setlist estuvo formado únicamente por temas extraídos de sus primeros trabajos. Es cierto que habría estado bien que hubiera habido algo de más audiencia en la sala, pero la entrada tampoco fue mala y los allí presentes terminamos con un estupendo sabor de boca.
La noche comenzó recordando su ópera prima, «Hipnosis», con la instrumental «Sonis Crash», que dio paso a una intensa «Tan raro, tan extraño, tan difícil», para seguir, sin dejarnos casi ni respirar, con «Ahora y no lo puedes ver». Una pequeña pausa, se presentan, y sin tiempo que perder caen «Napalm» e «Hipnosis», tras lo cual avanzamos unos años hasta «Inercia», con «Nuevo Harlem», donde el sonido de la batería de Eric Jiménez (¡enorme toda la noche!) levantó al público; si es que a estas alturas quedaba alguien por levantar, claro
Y esta fue la tónica general de la noche: Arias y los suyos interpretaron tema tras tema sin pararse a hablar demasiado pero sin que por ello el concierto resultara frío, poniendo fin al recuerdo de sus primeros 5 años como banda con esa maravilla, originalmente grabada con Enrique Morente, que es «Ciudad sin sueño», y que sirvió para poner un broche de oro a un viaje en el tiempo que todos deberíamos hacer en nuestra vida mínimo una vez. O dos, si se presenta la ocasión.
Texto: Alejandro Luque Barrés
Foto: Musa Pentesilea
