Son varios años destripando la esencia de las canciones folk, tanto sean suyas como llevando a ese terreno temas de gente tan distante a su negociado como puede ser Mariah Carey. Nada extraño en alguien que grabó en 2001 un disco de canciones tradicionales irlandesas tocadas únicamente con un violín.
Para su quinto disco oficial, Amidon se ha marchado a grabarlo lejos, a Islandia. Durante unos días convivió en el estudio con sus habituales músicos acompañantes, el bajista Shahzad Ismaily y el baterista Chris Vatalaro. Bajo la producción de Valgeir Sigurðsson (Bonnie ‘Prince’ Billy, Sigur Rós), registraron diez canciones folk tradicionales (salvo dos compuestas para la ocasión por Amidon).
Pero hay un elemento sorpresivo y que puede que haya condicionado el sonido del disco, ya que muchas de estas canciones pueden recordar a un mantra. Es la presencia del guitarrista Bill Frisell, acostumbrado a bregar en muchos frentes: jazz, música de Mali o bien como acompañante de músicos John Zorn o Ryuichi Sakamoto. De ahí la improvisación en el estudio en temas que muchas veces registraron en una única toma, con lo que lo que se pierde en inmediatez de las canciones se gana en profundidad.
Texto: Xavier Valiño
